Aberrations, representando arquitecturas oníricas

En 1882, Huysmans escribió al que fuera su maestro, Émile Zola, para anunciarle que su nueva obra, À rebours, sería una "fantasía salvaje y pesimista", rechazando el naturalismo en la novela contemporánea. Jim Kazanjian establece una relación entre aquel À Rebours y su propia obra, en cierto modo también salvaje y pesimista. Aberrations toma influencias de la ficción literaria de H.P. Lovecraft y Algernon Blackwood, elaborando un universo pictórico de laberintos ruinosos y espacios claustrofóbicos e inverosímiles.

La arquitectura imaginaria que Kazanjian construye en sus obras destaca por el continuo uso de la destrucción, el desmoronamiento y la inestabilidad como impulsos que deforman la realidad de la que parte su interpretación, y que siempre se retrata en un estado de transición.

Ninguna de sus producciones podría categorizarse como fotografía, aunque cada pieza es enteramente fotográfica. Recomponiendo cada obra a partir de fragmentos de un extenso archivo de imágenes, Kazanjian se libera de las limitaciones del retrato fotográfico para generar unos escenarios oníricos, extraños, y sin embargo familiares.