forte_forte primera boutique en Milán por forte_forte

Descripción del proyecto por forte_forte

Íntimo, pero no secreto. Privado, de una manera que invita a descubrir.

Una extensión espacial y emocional de los valores táctiles, atmosféricos y de ensueño que definen el espíritu único de la marca. Un entorno con un carácter delicado pero afirmativo, femenino en su ligereza, lleno de fuerza, que combina memoria y presente, viaje e introspección en una historia hecha de materiales y elementos reunidos siguiendo el hilo de la intuición.

Del mismo modo que las colecciones de forte_forte borran la distancia entre la prenda y el portador, la boutique desdibuja la línea entre lo público y lo privado, entre el espacio de ventas y el entorno narrativo. Acoge y rodea, a medio camino entre el descubrimiento y el sueño, transmitiendo la calidez del toque humano, siempre palpable en los tratamientos y acabados, en la búsqueda de una imperfección sublime. El proyecto, curado por Robert Vattilana y Giada Forte, es una armonía que proviene de evitar esquemas preestablecidos. Los muebles y las soluciones se mezclan en un todo líquido que incorpora signos, huellas de viajes, ecos de recuerdos compartidos. El tono de la expresión es ligero, profundo y sincero.

La historia espacial, enrarecida y suspendida, se desvela detrás de la cortina blanca de largo completo que envuelve la ventana frontal y parte de las paredes. Los protagonistas son los materiales, armonizados en una obra multisensorial que estimula la vista y el tacto, y en la que el carácter italiano de lo hecho a mano se convierte en un elogio de la imperfección. En el centro está el mármol travertino, expresivo en lugar de monumental, utilizado en bajorrelieve, en grano abierto o cerrado, en corteza o grabado con rayas, para paredes, muebles y, cortado en grandes losas salpicadas de mosaico de vidrio de colores, para el piso . La opacidad del mármol es iluminada por el latón que, como un signo dibujado a mano alzada en el espacio, define ligeramente los elementos de la pantalla, con sus perfiles orgánicos, el perímetro de los espejos, los ojos de buey y la silueta de los cómodos vestuarios. como compartimentos de un tren. La araña en la entrada es de latón, también. El viaje toma un giro sensual cuando se fusiona con la luz: la impalpabilidad transparente de las cortinas, detrás de las cuales las cajas de luz crean efectos de linterna, se alterna con la densidad voluptuosa del terciopelo, acolchada con botones encontrados reunidos a lo largo de los viajes y alineando las paredes de los vestidores . Los guijarros crean una textura de encaje mineral sobre las escaleras. La presencia de ensueño de la cortina escultórica de latón en la que las ampollas de vidrio hechas por massimo lunardon capturan la transitoriedad de pensamientos e inspiraciones se mezcla con el toque vegetal y doméstico de las plantas de strelitzia que brotan del jarrón de travertino.

La arquitectura y la exhibición de los productos crean un vínculo físico y metafísico entre el espacio y las colecciones, permitiendo que la pureza de la línea y la pureza poética de los materiales hablen por completo. Los elementos privados recopilados en todo el mundo le dan a la historia una firma personal: un dibujo de una mujer de didier mahieu, una cerámica de bitossi diseñada por aldo londi, un frasco de tubos de ensayo de vidrio comprados en un mercado en Los Ángeles, el busto de yeso de un venus procedente de una fundición francesa. Conchas, corales y elementos submarinos subrayan la surrealidad evanescente de la atmósfera.