La vegetación proporcionada por la naturaleza contrasta con la materialidad del edificio. La vivienda es de hormigón visto, un color grisáceo que potencia el verde intenso de la vegetación. Los huecos son organizados por toda la vivienda buscando una continuidad visual entre el interior y el exterior. Las carpinterías de las ventanas son abatibles o deslizantes permitiendo una mayor flexibilidad de apertura y facilitando una mayor conexión con el exterior.
Casa Sonda por Studio Cochi Architects. Fotografía por Ooki Jingu.
Casa Sonda por Studio Cochi Architects. Fotografía por Ooki Jingu.
Descripción del proyecto por Studio Cochi Architects
Casa Sonda es una residencia para una familia de seis personas.
Está ubicada en el centro de Okinawa. Aunque está situada entre una alta concentración de edificios comerciales y residenciales, mantiene parte del encanto de Okinawa a través de campos, parques y un gran cinturón verde al este de la casa que permanece después del desarrollo. El lugar descansa en un terreno suavemente ondulado rodeado al norte, este y sur por tierras más altas.
El cliente, que ama la arquitectura, se sintió especialmente atraído por el proyecto de la casa del arquitecto Tsutomu Abe. Solicitaron una propuesta que capturara la esencia de la casa de Tsutomu Abe teniendo en cuenta sus necesidades personales y centrándose especialmente en la relación con el entorno.
Todos los miembros de la familia participaron en las reuniones para crear una visión compartida de la Casa Sonda. A medida que avanzaban las reuniones, la idea era crear un jardín en el centro de la casa. Un espacio que permitiría una variedad de actividades sin dedicar el espacio a un propósito específico. Posteriormente, organizar las habitaciones privadas de la familia rodeando el espacio del jardín central.
Casa Sonda por Studio Cochi Architects. Fotografía por Ooki Jingu.
Normalmente, se consideraría una desventaja que un espacio residencial esté rodeado de un terreno más elevado. Sin embargo, es una característica de la Casa Sonda para protegerla, con altas barreras naturales, de las tormentas tropicales y tifones comunes en esta región.
El proyecto abre el interior de la casa al espacio verde situado en el centro y al este. El interior es un espacio de una sola habitación casi sin particiones. Las habitaciones privadas están abiertas, son visibles y a la vez se ocultan progresivamente. La característica más destacable de la vivienda es la conexión de cada estancia con el espacio verde común exterior. Cada habitación se abre al jardín central, que a su vez se abre al gran espacio verde del este.
Para evitar la monotonía interna, los niveles de techo y suelo varían según el carácter de cada espacio habitable. Las ventanas también son abundantes y variadas en tamaños para facilitar diferentes vistas.
Esperamos que este proyecto de vida abierta con una relación única con sus espacios naturales madure hasta convertirse en la residencia ideal para la familia, incluso en una zona residencial tan cerrada.