Reconversión colaborativa de un skate park por Straddle3

Descripción del proyecto por Straddle3

¿Pueden los vecinos de un barrio de Barcelona corregir a un Premio Pritzker? Este es el caso del proyecto participativo de reconversión de la Porta Firal de Barcelona, ahora rebautizada como Plaça del Moviment Obrer. Su programa es la adecuación del espacio existente para satisfacer las necesidades del vecindario, y especialmente ciertas reivindicaciones de colectivos de practicantes de deportes urbanos.
 
El paseo de la calle Foc fue originalmente proyectado por Toyo Ito Associates y ejecutado por fases. Es un gran espacio público que proporciona acceso a la nueva Fira de Barcelona desde la Montaña de Montjuïc. La fluidez de su diseño proporciona un marco adecuado a esa infraestructura de carácter global que es la nueva Fira de Barcelona, escenario de eventos como el Mobile World Congress o el festival Sónar. La plaza del Moviment Obrer es el extremo oriental del paseo y fue la última fase en ejecutarse, hace ahora siete años. Es un espacio en el que se puede reconocer la tensión entre un diseño de primera línea, concebido a gran escala, y su encaje con la cotidianidad local. Desde el punto de vista del vecindario, el espacio público resultante resultaba inhóspito e infra-acondicionado, a pesar de su indiscutible elegancia. Esta realidad se vería agravada por el estado de la vegetación, especialmente del arbolado, que no conseguía prosperar debido al escaso tamaño de los alcorques y de problemas en el sistema de riego. A este hecho se superponía la ausencia de otros elementos que pudiesen proporcionar sombra, especialmente teniendo en cuenta la extensa superficie pavimentada.
 
A pesar de las circunstancias, algunos patinadores locales adquirieron el hábito de utilizar el espacio como punto de partida para sus rutas colectivas. Este fue uno de los detonantes del paquete de demandas que ciertas asociaciones hicieron llegar al ayuntamiento. Straddle3 fue encargado por el programa Pla de Barris para coordinar un proceso de co(re)diseño de la plaza. Para tal fin se definió una agenda, una metodología participativa y finalmente la redacción colaborativa de un anteproyecto y posteriormente de un proyecto ejecutivo. La intervención incluyó eventos en el barrio que combinaron situaciones de difusión, participación y deporte. Las palabras clave para el desarrollo del anteproyecto fueron inclusión, confort y respeto por el proyecto original.
 
El resultado, a modo de “remix”, respeta las trazas originales del diseño y se integra en el resto del paseo con naturalidad. Se incorporan nuevos parterres con las mismas formas que los originales de manera perimetral, con el fin de reservar una zona a la práctica de los deportes urbanos, en la que las trazas de dos parterres resituados se convierten en “bowls”, relacionados entre sí con otros elementos patinables que también se basan en los vectores del diseño original. Para potenciar el confort se concentran los árboles en los parterres periféricos, mejorando su sistema de riego, promoviendo una considerable densidad verde en un futuro próximo, mientras que se introduce una gran pérgola poblada por plantas trepadoras para garantizar sombra desde el primer día de uso."