Renaturalización de la nueva planta hidroeléctrica de Hagneck en Suiza

Descripción del proyecto por Raymond Vogel Landschaften AG

Lejos de los asentamientos y el tráfico, detrás de la colina Molasse se encuentra el delta Hagneck con la planta hidroeléctrica en un paisaje natural. El lugar históricamente significativo en el lago de Biel se está adaptando ahora a las necesidades actuales, se está mejorando el viejo paisaje cultural deteriorado y sus cualidades existentes.

Este contexto es la base para la idea del diseño. La naturaleza y el paisaje se configuran y estructuran en el sentido de un parque paisajístico. Las áreas de protección de la naturaleza, las áreas de preservación de la naturaleza, las áreas de recreación y las áreas de trabajo construyen secuencias llenas de tensión entre ambientes extensamente e intensamente usados ​​y mantenidos. El foco principal está en el modelado del terreno, la secuencia espacial de los bosques y las vistas en el paisaje cerca del lago.

El mayor significado del nuevo es el sistema de vertido y su influencia en el paisaje del lago de Biel. La inmensidad de la superficie del agua permite una gran impresión de la Isla de San Pedro, los viñedos de la orilla izquierda del lago y la montaña Chasseral. Uno de los objetivos del equipo de concurso era la apariencia baja y compacta de la planta hidroeléctrica. Por lo tanto, el edificio está excelentemente incrustado en el contexto del paisaje.

El proyecto es uno de los primeros ejemplos contemporáneos en Suiza de cómo el paisaje de las instalaciones de infraestructura se está convirtiendo en un parque paisajístico para el descanso. De esta manera este proyecto ejemplifica el futuro desarrollo del paisaje en áreas y países densamente poblados.

No hay separación entre el hombre y la naturaleza, ya que el hombre es parte de la naturaleza. A veces, los seres humanos usan su libre albedrío para escoger distanciarse de la naturaleza.

Esta es la actitud detrás de este proyecto, reflejada en el diseño respetuoso y sensible del nuevo paisaje. La calidad de vida no es una «cosa del tiempo y del dinero», la calidad de vida siempre está presente cuando nosotros como seres humanos permanecemos presentes, con los sentidos abiertos y realizando la conexión. El arte de la Arquitectura del Paisaje es diseñar paisajes que apoyen la revelación de la naturalidad humana de estar conectados, que apoyen la memoria de estar en casa en este planeta. De esta manera, el cuidado de la naturaleza se convierte en una parte completamente natural del comportamiento humano.