Viviendas con regulación bioclimática. 18 viviendas sociales en Valenton por Atelier Benjamin Fleury

Descripción del proyecto por Benjamin Fleury

Patrimonio e inserción
El proyecto se instala en el antiguo aparcamiento al aire libre de la urbanización Pré l'Arpent, ocupado principalmente por vehículos desguazados. Este conjunto de viviendas, construido en 1974 por la agencia Andrault y Parat, consta de un edificio escalonado de tres plantas con un aparcamiento en la primera planta.

Esta construcción de gran calidad patrimonial demuestra una época en la que estos arquitectos trataban de conciliar las cualidades de las viviendas colectivas e individuales mediante viviendas a medio camino entre ambas. Diseñaron diversas variantes con la misma tipología, a lo largo de todo el territorio.
 
Al igual que muchos propietarios sociales, empujados por la escasez de suelo, Valophis hábitat busca desarrollar sus viviendas mediante la densificación de los espacios libres de sus propiedades. En este caso, el encargo consiste en levantar una nueva construcción de veinte viviendas en el hastial de este edificio patrimonial, de forma continuada a la urbanización Pré l'Arpent.
 
El papel de este diseño consistía en evitar deliberadamente cualquier estrategia de mimetismo, o por el contrario de afirmación de la dualidad, que habría conducido en ambos casos a un proyecto debilitado del edificio existente. El método consistió, pues, en construir un volumen sencillo con un vocabulario compatible y discreto, con gran sobriedad.
 
Volumen y materialidad
Concebimos un volumen construido de tres niveles suspendidos sobre un vacío de planta baja que alberga los aparcamientos. Para encontrarse con los estratos horizontales de las terrazas vecinas, el volumen tiene líneas horizontales marcadas por grandes franjas. Siempre en un espíritu de resonancia, el relleno de las fachadas entre estas líneas horizontales se compone de ladrillos de hormigón de color blanco de gran longitud, que recuerdan al ladrillo vecino.
 
En esta búsqueda de la supresión, los huecos son de idéntico tamaño y están dispuestos en una doble retícula vertical y horizontal estrictamente sistemática.

El último nivel, fuertemente retranqueado, aligera y da al edificio una silueta horizontal. Un remate de hormigón, que intensifica la forma de proa del conjunto, prolonga la fachada de este ático. Los materiales son crudos en la primera planta (hormigón y mampostería) y blancos en los pisos.

Es esta sobriedad de materiales, colores y volúmenes, así como en la reinterpretación del vocabulario arquitectónico del edificio vecino -altura, expresión de la horizontalidad, vanos verticales, bimaterialidad de las fachadas actuales lo que creemos que es el homenaje necesario a la obra de Andrault y Parat.
 
Gestión del agua de lluvia
Para preservar el alto nivel freático, se han dispuesto dos céspedes de retención hundidos, con mucha vegetación, a ambos lados del edificio. Generan un paisaje semihúmedo de calidad y son ecológicamente virtuosos, favoreciendo el desarrollo de la biodiversidad.

El acceso al vestíbulo desde la calle se realiza a través de un camino que atraviesa el jardín acuático.
Para dejar al descubierto el camino natural del agua de lluvia, los balcones y las terrazas tienen barbacanas rectangulares en los bordes, equipadas con cadenas que guían el agua de lluvia hacia los dos céspedes empotrados.

Del mismo modo, el agua del tejado pasa por los conductos técnicos de los apartamentos, recorre la parte inferior del piso alto del aparcamiento, baja contra las columnas y acaba en canalones de hierro fundido que desembocan en los jardines acuáticos.
 
Hábitat bioclimático
El confort de la vivienda se genera principalmente mediante una precisa implantación bioclimática de los apartamentos. Así, en cada nivel, cuatro de los cinco apartamentos tienen una doble orientación o son transversales.

El único apartamento con orientación única está abierto al oeste. Los apartamentos de doble orientación están diseñados con salas de estar en esquina prolongadas por balcones. Los rellanos también están pensados para la comodidad de la vida: con un gran ventanal instalado frente al ascensor lo convierte en un espacio luminoso y acogedor, propicio para la conversación entre los residentes.