Color infantil: edificio público multifuncional en Sant Martí

Descripción del proyecto por SUMO Arquitectes y Yolanda Olmo

El Edificio Público Multifuncional Sant Martí está compuesto por la Escuela de Infantil i Primaria Sant Martí, junto a un aparcamiento de dos plantas sótano y un Centro de Barrio-Escuela de Adultos, en el barrio de Poblenou en Barcelona.

Es el aparcamiento inferior el que establece la retícula base a partir de la que se organizan los programas en las plantas que emergen de la cota cero.

¿Cómo re-pensar un centro educativo, desde la urbanidad de su emplazamiento?

Actualmente, las fichas normativas y las directrices que guían el desarrollo de este tipo de equipamiento, son indiferentes al emplazamiento y desarrollan las mismas exigencias de espacios exteriores y semi-exteriores, se emplace en un entorno rural o en uno totalmente urbano.

Estas exigencias se traducen en escuelas muy extensas y permeables en entornos rurales y en escuelas excesivamente compactas e impermeables a la ciudad en entornos urbanos.

Desde el principio, el proyecto de la Escuela Sant Martí tiene la voluntad de crear una escuela amplia, extensa, sensible y permeable al entorno, pero eminentemente urbana.

El edificio se inserta en un entorno de alta densidad donde el Eixample Cerdà colisiona con en el tejido industrial del Poblenou. La densidad del programa (interior y exterior), las dimensiones del solar, las limitaciones urbanísticas y la posición inamovible de uno de los programas (aparcamiento bajo tierra) favorecen la clara decisión de proyecto de organizar la escuela mediante un sistema de franjas alternas, de vacios y llenos, con la máxima disposición del programa en planta baja y donde todas las cubiertas se convierten en los patios de juegos de la escuela. Esta alternancia permite y mejora la iluminación, ventilación y vistas de los espacios interiores de la escuela.

Aparcamiento. Edificio público multifuncional en Sant Martí por SUMO Arquitectes + Yolanda Olmo. Fotografía © Aitor Estévez.

La construcción de las dos plantas sótano, dedicadas a aparcamiento de titularidad pública, permiten entender toda la escuela como una gran cubierta, y repensar ésta como las zonas de juego de la escuela. Se genera una variedad tipológica de espacios exteriores, como son: patios a nivel de calle, porches relacionados con estos patios, espacios libres extensos en planta primera, y espacio para huertos en planta cubierta (+3), que organizan el programa en función de su relación con ellos.

Junto a ésta secuencia de espacios exteriores, la materialidad de las fachadas, en relación a estos espacios exteriores interiores a la escuela, y al entorno urbano heterogéneo, conforman la imagen exterior de la Escuela.

Las fachadas laterales, dónde se produce la permeabilidad entre los patios y los pasajes laterales se materializan de manera pesada, muy tectónica, con muros de hormigón texturado y cerramiento de acero perforado formando un patrón abstracto.

En cambio, el resto de fachadas, bien a calle, bien a los exteriores interiores de la escuela, se construyen con un sistema pre-industrializado, de montaje en seco y rápida ejecución, mediante una Fachada Ventilada de Hoja Interior Ligera, con altas prestaciones energéticas. La solución constructiva de las cubiertas es sensible a la importancia de éstas en el edificio (por programa y por extensión). Una Cubierta Ventilada Transitable permite que el comportamiento climático de éstas, en el conjunto del edificio sea excelente. Las soluciones constructivas de las cubiertas, de las fachadas, de su protección solar a sur y la conexión de la escuela al sistema urbano de Districlima construyen una escuela urbana con Certificación Energética Clase A.

La imagen exterior de la escuela es voluntariamente homogénea y sobria como respuesta a la heterogeneidad del entorno. En cambio, la vida interior de la escuela es heterogénea, llena de color y frescura.

Texto.- SUMO Arquitectes y Yolanda Olmo.