Descripción del proyecto por Markéta Bromová architekti
El apartamento está situado en un edificio nuevo en las montañas de Jizera. El apartamento está en la planta baja de la casa, por lo que está directamente conectado física y visualmente con el paisaje circundante. Se accede al apartamento desde la segunda planta a través de un pequeño pasillo, que conecta con una escalera doble. Este camino a través del pasillo y el descenso de la escalera a la planta inferior directamente al interior del apartamento puede verse como una especie de filtro. Se encuentra en un largo pasillo desde el que las puertas conducen a los dormitorios individuales, un cuarto de baño y un aseo separado. El pasillo también separa el apartamento en dos partes funcionales: instalaciones técnicas (baños, aseo, sauna, cocina) y zonas de estar (dormitorios y sala de estar).
La vista a través del pasillo a la parte de la cocina asomada le llevará a la zona principal, donde se concentra toda la acción alrededor de la chimenea. También se ve el cómodo asiento en forma de U que se inserta entre la chimenea y las paredes. Enfrente está la mesa y el banco del comedor, que es una continuación de la línea de la cocina.
El concepto principal del diseño consiste en dos principios opuestos y complementarios. El solado de hormigón, intemporal y muy duradero, que era una necesidad dada la numerosa familia y el tráfico que se considera, está en el suelo de todo el apartamento. El segundo principio se basa en el carácter histórico de los interiores de las casas de campo. Las soluciones materiales y la ejecución de los techos del espacio principal, la cocina, los armarios empotrados y la chimenea remiten a la solución tradicional, pero mantienen los requisitos modernos de estética o mantenimiento.
