Memoria de Proyecto Josep Miàs.
El CEIP Annexa-Joan Puigbert es el nombre que recibe el centro escolar que ocupa un edificio de la primera mitad de la década de los 50 en forma de T, con un volumen principal a lo largo de la calle principal y un edificio perpendicular a éste en un punto más o menos central. El edificio se encuentra en una posición topográficamente extraña dado que el terreno presenta una pendiente muy importante y éste se halla encastado en este desnivel en el sentido de la misma pendiente.
El edificio que construye la calle estaba totalmente en uso, contrariamente al edificio perpendicular, que estaba en una situación de enorme deterioro, sobre todo estructural.
El programa propuesto por el Departament d’Ensenyament de la Generalitat de Catalunya era de ampliación de aulas ordinarias y aulas específicas con sus servicios correspondientes, con un gimnasio o sala polivalente.
El proyecto propone la demolición del volumen perpendicular de manera que pueda darse continuidad al espacio exterior, desde el pinar en su cota superior al patio en la cota inferior. En esta topografía, y en su sección longitudinal, se incorpora el espacio de sala polivalente o gimnasio. La coincidencia de este espacio incorporado a la sección del terreno, con el núcleo principal de acceso, escalera interior del edificio, permite definir y descubrir un nuevo espacio de relación entre el edificio existente, el nuevo espacio lúdico y deportivo del gimnasio, y el mismo patio exterior. La escalera existente se deja, pues, suspendida, liberándola de los forjados que la rodeaban, y se incorpora a un nuevo espacio vertical, que tiene continuidad con la sala polivalente y el propio patio.
El programa de aulas especiales permite reorganizar la propuesta del Departament d’Ensenyament, de manera que en lugar de incorporar en el nuevo edificio aulas convencionales y otras especiales, se reorganiza el existente con la totalidad de las aulas convencionales y se especializa el nuevo edificio con las especiales. Este nuevo edificio de aulas especiales, tecnología, biblioteca, informática, música, etc., se adosa a la medianera vecina, y no al edificio existente para no negar su protagonismo y personalidad, conectándose a éste de manera puntual. El nuevo volumen será la nueva entrada al centro, con escaleras y ascensores, además de entrada natural al patio. Este planteamiento o propuesta de acceder por este nuevo edificio se refuerza por la existencia de una pequeña plaza arbolada en su parte delantera, que hace las funciones de vestíbulo a la aire libre de la escuela. El traslado del acceso a este punto, facilita asimismo el funcionamiento del centro sobre todo para dejar y recoger a los niños.
También permite que este nuevo edificio pueda funcionar de manera independiente del resto del centro y pueda ofrecer servicio nocturno, o un servicio más general al público.
Ambos edificios se diseñan a partir de un esqueleto metálico estructural claro, el cual se reviste con materiales y sistemas constructivos industriales. En realidad, la estructura metálica permite una gran rapidez de ejecución y la incorporación de cerramientos industrializados, paneles prefabricados metálicos, tanto opacos como vidriados en el interior de su geometría.
En cierto modo, podemos hablar de una intervención quirúrgica. Tanto en el volumen de la sala polivalente, previo recorte del edificio existente en el punto de máximo compromiso, esto es, la escalera principal, dejándola en el aire; como en el edificio de aulas especiales en su conexión con el existente.