El laboratorio

Trabajar en gestión urbanística proporciona la oportunidad de diseñar, modificar y zonificar los diferentes parámetros y espacios con los que una ciudad, un pequeño pueblo o un barrio van a ser regidos en el futuro. Cuando te sientas a pensar en la solución más adecuada para un territorio o pequeño barrio, los condicionantes y las reglas de juego son algo diferentes. El cliente en principio suele ser uno, pero en la práctica son muchos más ya que las soluciones repercuten a un número indeterminado de intereses generales y particulares. 

En el caso de un Plan Especial de Reforma Interior, por ejemplo,  se cuida que todos los coeficientes y ratios impuestos por la normativa se cumplan a la vez que intentas aportar la mejor solución formal colocando determinados  equipamientos, zonas verdes, número de viviendas y parámetros edificatorios  dentro de ese entramado de parcelas edificadas y no edificadas, privadas y públicas, que conforman un determinado recorrido viario generado con el paso de los años.

No hablaré de aspectos técnicos ahora porque hay gente mucho más cualificada para divagar sobre ello, sino simplemente os hablaré de mis inquietudes y experiencias vividas durante el proceso, que de alguna forma para eso se ha creado este diván semanal.

El dialogo.

El hecho de estar al lado de alguien con experiencia me ha dado ese punto de tranquilidad en todo lo que devino después del trabajo puramente técnico. En primer lugar, el dialogo con los políticos se estableció de la misma manera con la que nos sentamos cualquiera de nosotros con un cliente. Como técnicos, expusimos  las reglas de juego de rango normativo municipales y supra municipales que configuran el tablero con las que se ha llegó a esa solución determinada y se debatió en una serie de reuniones sobre la adecuación de las diferentes piezas o tramas que se habían colocado hasta que se llega a un documento gráfico satisfactorio.

Fotograma de la película Frankenstein (1931) dirigida por James Whale, basada en la novela Frankenstein o el moderno Prometeo de Mary Shelley.

 La exposición 

Llegó el día en el que ese documento se exponía al público el avance del  plan. Comenzó el periodo de sugerencias y las visitas de los vecinos curiosos por conocer las intervenciones propuestas en su barrio. Los días pasaban con tranquilidad y atendíamos a las citas explicando la propuesta hasta que nos enteramos de la existencia de una plataforma vecinal en contra del plan 3con página web incluida. No es agradable ver según qué comentarios  incendiarios sobre tu persona cuando vienen de gente que ni siquiera te conoce sobre todo cuando has hecho únicamente tu trabajo desde una lógica razonada, dando oportunidad al debate y a las sugerencias.

Convocamos una asamblea abierta para exponer de manera abierta el plan y responder a todos las dudas que suscitara el proyecto abiertos a cualquier cambio razonable que se propusiera. He de decir que la sensación que me embargó al sentarme delante de ese auditorio fue la de que nadie quería  conocer a nuestro “Frankenstein”, al igual que la novela de Shelley.

Arengados desde el desconocimiento o la manipulación, nuestro “monstruo” era una amenaza para la gran masa y las antorchas ganaron en primera instancia frente al dialogo.

Todo esto  te ayuda con el tiempo a relativizar sobre la importancia de las cosas. De hecho, la mayor parte de las veces siempre se produce esta situación de rechazo ante cualquier elemento que distorsione la rutina o la retina de la sociedad.

El miedo al cambio. Muchos colectivos utilizan por motivos políticos o personales ese miedo para instigar ese rechazo. Cuántas obras han sido rechazadas en primera instancia...y el tiempo ha demostrado que ese edificio, esa plaza, ese barrio han pasado a ser parte intrínseca del entorno y la gente se las hace suyas.

Una cosa está clara, Todo lo que es viejo en algún momento fue nuevo.

Es el asumir un elemento nuevo, la comprensión del mismo, el uso y el tiempo lo que hace que un elemento arquitectónico cobre valor en la sociedad.

Fotograma de la película Young Frankenstein (El jovencito Frankenstein en España), 1974.

Los grandes desmanes urbanísticos, los excesos en la construcción y el mundo de la corrupción nos han puesto en el punto de mira lo queramos o no. Corresponde a las universidades, a los colegios y a nosotros mismos recuperar la confianza perdida en nuestro gremio para que no se siga  manipulando con el “miedo”, antes incluso de poder expresar nuestras ideas o proyectos.

El uso y el tiempo nos darán después la razón…. o no. Hasta la semana próxima.

 

¡¡CONTINUARÁ... LA PRÓXIMA SEMANA MÁS!! > "PRENSA AMARILLA Y OTROS PERJUICIOS"

 

IN TREATMENT - METALOCUS.

DIRECTOR: JOSÉ JUAN BARBA. COORDINACIÓN: INÉS LALUETA. ORGANIZACIÓN: INÉS LALUETA, PEDRO NAVARRO. VERSIÓN INGLÉS: KAREN SIMPSON. INVITADOS 1ª TEMPORADA: JOSÉ JUAN BARBA, MARINA DIEZ-CASCÓN, SERGIO DIEZ-CASCÓN SOLER, LARA FERNÁNDEZ GONZÁLEZ, CARLOS GERHARD PI-SUÑER, MONTSE PLA GARCÍA-CASTANY, XAVIER NICOLAU CUYÀS, FERNANDO RIAL PONCE, VERÓNICA ROSERO.

 

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Publicado en: 24 de Mayo de 2011
Cita: "EL MONSTRUO DE FRANKENSTEIN. In Treatment [M]" METALOCUS. Accedido el
<https://www.metalocus.es/es/noticias/el-monstruo-de-frankenstein-treatment-m> ISSN 1139-6415
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