El Pabellón español ha seleccionado propuestas que valoran el proceso creativo por encima de la pieza icónica terminada, procesos ejecutados de forma multidisciplinar y con un claro impacto social positivo. Es por ello que la selección de propuestas recogidas es muy heterogénea.
«El equipo seleccionado plantea el tema de la incertidumbre de su generación y lo simboliza en un original proyecto: una nube de currículos profesionales distintos, indicando cómo la carrera ha dejado de ser una práctica única de la Arquitectura y se ha transformado en una mirada de nuevos empeños. En cómo el trabajo de arquitectos y arquitectas por una sociedad mejor se puede hacer ahora desde muchos campos, antes inexplorados.»
Manuel Blanco ETSAM director.
Mostrar el trabajo de profesionales que han sabido afrontar la incertidumbre buscando nuevos usos a las herramientas que ofrece la Arquitectura ha sido el principal objetivo de esta edición. En palabras de los comisarios, la exposición del Pabellón no admite una respuesta concreta a la pregunta de Sarkis, ¿Cómo viviremos juntos?, sino que invita a generar infinitos interrogantes, que, sin embargo, guardan implícita una certeza: el futuro será juntos o no será. La INCERTIDUMBRE viene para quedarse y hay que aceptar el reto de permanecer en el cambio.
El proyecto del pabellón español, presenta una selección de acciones que hibridan y amplían las competencias de la arquitectura para hacer frente a las nuevas demandas sociales, desdibujando fronteras disciplinarias y conceptuales impuestas que han acabado convirtiéndose en dogmas, creando conceptos abiertos a partir de realidades antes percibidas como antagónicas. La incertidumbre nos insta a abrir nuestras certezas, centrándonos en la investigación de sus límites y mostrando acciones que permiten que diferentes dimensiones de la realidad se conviertan en elementos procesales dinámicos y adaptables.
Es así como podemos concluir que el objetivo de las obras expuestas en el pabellón no es mostrar un espacio construido, sino aportar un catálogo de estrategias arquitectónicas flexibles que serán necesarias para afrontar el futuro de nuestra convivencia y sus implicaciones sociales y medioambientales
Itinerario de la exposición
El pabellón español se convierte en una máquina interactiva, una plataforma incierta, un proceso continuo, un espacio de reflexión donde, en vez de consolidar certezas ya obsoletas, se invita al visitante a participar en la construcción colectiva de preguntas que surgen del lema de la Biennale de esta edición.
Experimentar la incertidumbre comienza con la inmersión en una Nube heterogénea de porfolios, generada a partir de miles de hojas de papel, donde se recogen propuestas y acciones que construyen un repositorio de estrategias para poder vivir juntos, una fuente inagotable de incertidumbres que funciona como base de datos del resto del pabellón.
En el anillo expositivo que rodea el espacio de la Nube, tiene lugar el Sorteo, un proceso que, reflejando la transformación continua de nuestra realidad, convierte cada visita del pabellón en una experiencia única e indeterminada. El visitante se adentrará en el Sorteo a través de cuatro salas laterales que, funcionando como gabinete de curiosidades, permiten divagar en un paisaje no jerarquizado de piezas abstractas y descontextualizadas, representativas de los proyectos seleccionados. A mitad de su recorrido atravesará la sala Juntos, donde mediante una proyección audiovisual, podrá observar la secuencia de operaciones interpretativas por la cual se seleccionan desde la Nube los diferentes proyectos expuestos.
En estos espacios el Sorteo conecta los distintos proyectos basándose en las fronteras disciplinares que cuestiona cada uno, reflejando su relación mediante una escenografía en la que actúan objetos, luces y pantallas. Las relaciones temporales que crea esta secuencia expositiva permiten a cada proyecto salir de los límites de su contexto y abrirse a nuevas lecturas transversales, reforzando el papel de la incertidumbre como generadora de nuevas oportunidades.