El edificio de Borrassà destaca por la utilización en su construcción del ladrillo que se va utilizando en diferentes texturas para las paredes, ventanas o balcones según las tipologías de apartamentos. La estrategia tipológica es similar a la explorada realizada en el conjunto de 85 viviendas sociales con estructura de madera realizadas por el estudio en Cornellà.
Tan solo un «pero» a un buen proyecto, un «pero» importante que se repite sistemáticamente en demasiadas propuestas urbanas de muchas de nuestras ciudades: la ausencia de programa urbano en la planta baja.
El autismo urbanístico hace que a pesar de la trama urbanística, el edificio en lugar de establecer una continuidad urbana, que cose ciudad, genera actividad y seguridad a sus ocupantes, quede abocado nuevamente a la desconexión que caracteriza a los bloques y torres aislados, provocando un aumento de la movilidad y huella de carbono insostenible incluso para la cotidiana compra de una barra de pan.
54 viviendas sociales en Borrassà por Peris + Toral. Fotografía por José Hevia.
54 viviendas sociales en Borrassà por Peris + Toral. Fotografía por José Hevia.
Descripción del proyecto por Peris + Toral Arquitectes
El proyecto propone una única unidad de agregación, es decir, una única comunidad de vecinos que simplifica la gestión de las viviendas de alquiler protegido y reduce el mantenimiento al optimizar el número de ascensores y escaleras. A la vez que permite concentrar todos los accesos del edificio junto a un único vestíbulo, libera gran parte de la planta baja, ofreciendo flexibilidad de distribución al equipamiento.
Se trata de una unidad de agregación mixta que combina un cuatro por rellano en las seis plantas de la torre y pasarela central con ocho viviendas por rellano en las cuatro primeras plantas, logrando un total de 55 viviendas. La disposición en esvástica de las tipologías de la torre permite transformar el rellano de la torre en una pasarela central de 1.80 metros de anchura. La disposición en esvástica reconoce todas las fachadas por igual, de manera que el edificio carece de testeros, un criterio uniforme de fachada envuelve todo el edificio.
Un patio dislocado de cuatro plantas de altura en el centro de gravedad del edificio ilumina, ventila y cualifica la pasarela, al tiempo que garantizan la ventilación cruzada de todas las viviendas.
54 viviendas sociales en Borrassà por Peris + Toral. Fotografía por José Hevia.
El baño, la cocina y los conductos de instalaciones se agrupan en la medianera para liberar el resto de la planta y así ofrecer tres distribuciones posibles, y por tanto, tres maneras de habitar diferentes: Una distribución convencional que dispone la sala en la esquina, separando la zona de día y de noche. Una distribución que agrupa las habitaciones en la esquina diferenciando el ámbito de la cocina-comedor respecto a la sala, evitando que las funciones de los espacios alejados interfieran entre sí. Y una opción intermedia donde la sala ocupa una posición central para tener dos espacios diferenciados pero conectados visualmente. Estas dos últimas variaciones mejoran la ventilación cruzada de la vivienda y sala con doble orientación y vistas.