El resto es un mar agitado de chapa metálica de 15 mm, material constructivo naval, soporte gráfico, horadado para alojar vitrinas, creando branquias que alojan iluminación, plegándose como olas protectoras.
Descripción del proyecto por Rocamora Diseño y Arquitectura
El proyecto museográfico para el pecio Sorres X fue, desde un principio, una suerte de coincidencias que permitieron que la solución de proyecto se produjera con naturalidad. El lugar destinado para el proyecto, dentro del Museu Marítim de Barcelona, se sitúa en la zona oeste del complejo, junto a unas cristaleras que permiten que el espacio dialogue con los lienzos de muralla medieval del exterior, contemporánea a la embarcación expuesta. Esta relación íntima de la arquitectura del mar del Sorres X y la arquitectura de la ciudad y de su muralla a oeste, permitía una armonización y resumen de conjunto de la Barcelona de la época medieval.
El lecho de gravas que se encontraba en la base de la muralla entre las cristaleras y la arquitectura medieval, se propone en el proyecto “entrando” en el museo como un lecho marino líquido que servirá de soporte amable para el pecio, a semejanza casi mimética de como se encontró y excavó por los arqueólogos en los años 90, sirviendo así de soporte respetuoso al máximo a la pieza a exponer. El resto, el mar agitado de chapa que sirve de límite al visitante, es un continuo metálico, material constructivo naval de 15mm de grosor que se pliega en armonía con la arquitectura preexistente, sirviendo de soporte a la gráfica en paredes, horadándose para permitir alojar vitrinas, desfasándose como branquias para alojar iluminación, plegándose como olas para proteger la pieza arqueológica, sirviendo de soporte gráfico en el pavimento para orientar al visitante con referencias gráficas marinas medievales que le indican el norte-sur, como lo hicieron en otro momento las cartas náuticas a los marineros.
Esta exposición fue inaugurada el 25 de febrero de 2019, posteriormente a las tareas de recuperación y conservación. La embarcación fue encontrada en Castelldefels en 1990 durante las obras de construcción del Canal Olímpico y data de la segunda mitad del siglo XIV.
Junto con la muestra de los restos de la embarcación Sorres X se exponen dos embarcaciones de principios del siglo XX que permiten establecer analogías formales con la barca medieval. Estas embarcaciones son el caro d’art Papet, de 1907 y la embarcación a vela Madrona, de 1924. La exposición se completa con diversos paneles explicativos del mundo de la navegación en el siglo XIV junto con una gráfica de inspiración medieval, un modelo de la barca Sorres X a escala 1:20, fragmentos de una jarra que transportaba el pecio, restos del contenido de las jarras formado por pescado en conserva (vertebras de pez, conchas, escamas), un fragmento de jarra con el sello de procedencia y un audiovisual que muestra el proceso de restauración llevado a cabo por el Museu Marítim de Barcelona.