Materialmente la intervención se caracterizas por el uso de la cerámica para potenciar los recorridos que ayuden a cuestionar los límites del espacio. Además se utilizan materiales como hormigón, la madera en DN pulimentada y la cal estableciendo un interesante diálogo con el entorno, y las viviendas contiguas.
Casa MBT por Horma estudio. Fotografía por Mariela Apollonio.Descripción del proyecto por Horma estudio
Intervenir desde la tradición y el contexto.
El proyecto consiste en una intervención puntual en un entorno marítimo histórico con unas reglas establecidas muy definidas. La serie de viviendas nos ofrece la oportunidad de intervenir en una de ellas y su vacío contiguo. La estructura urbana establece una relación de viviendas adosadas propia del barrio histórico de pescadores en que se ubica. La Ley de Costas vigente, estricta en la capacidad de intervención en este tipo de inmuebles, también impide reconstruir las viviendas deterioradas por el paso del tiempo y es aquí donde surge el vacío que da pie a una nueva interpretación de la tipología existente.
La reflexión principal del proyecto consiste en la reinterpretación de la línea divisoria entre parcelas, hasta el momento continua como límite entre propiedades, pero ahora abierta a un trazado libre capaz de moldear tanto el lleno como el vacío que separa.
Este límite, anteriormente rígido, se libera en el ámbito de la ampliación evidenciando, por un lado, la relación entre la preexistencia original y su ampliación y, por otro, la relación entre interior y exterior.
Casa MBT por Horma estudio. Fotografía por Mariela Apollonio.
La vivienda original, de aproximadamente 55 metros cuadrados, precisa de una ampliación para dar el uso familiar requerido, maximizando las posibilidades de una casa de verano, a la vez que optimizando cada metro cuadrado para minimizar los recursos invertidos. La redefinición interior de la construcción existente permitirá definir y vincular los espacios estrictamente necesarios, articulando también la relación entre el interior y el exterior para sacar el máximo partido a una superficie intencionadamente acotada.
La superficie ampliada añade en 20 metros cuadrados que, en en lugar de pretender ser un anexo reconocible, pretende dar sentido a una estrategia global, complementando el volumen original y dando sentido a una situación concreta en el lugar en el que se encuentra.
Un delicado trabajo en planta y en sección donde los centímetros adquieren una importancia fundamental, permite definir matices que dan la propiedad y la proporción que cada espacio necesita para definirse.
Materialmente, una plaqueta cerámica recorre los espacios exteriores entrando también en el interior para volver a cuestionar los límites del espacio. Esta plaqueta, convertida en textura en la extensión de su superficie, no pierde su dimensión y carácter unitario, siendo reconocida como tal en los movimientos que la sección propone.
Casa MBT por Horma estudio. Fotografía por Mariela Apollonio.
Además de la cerámica, el resto de materiales que construyen el proyecto se exponen también en su crudeza y naturalidad, trabajando conjuntamente caracterizar el espacio y favorecer la vinculación entre el espacio interior y el exterior. Hormigón, madera en DM pulimentada, cerámica y cal buscan crear una nueva espacialidad con los materiales originales, ya existentes en las viviendas contiguas, favoreciendo de esta forma a la integración de la vivienda en su entorno.
Arquitectura mediterránea en su propio lugar.
