La delimitación de este sendero se lleva a cabo mediante muros hechos de materiales típicos del terreno y de Marratxí como el bordillo de marés y un muro litoral de piedra seca. En las dos entradas del proyecto encontramos hitos de marés, el de la entrada principal siendo una prolongación de la residencia y la otra siendo un acceso para el personal de mantenimiento. Dentro del parque arqueológico se encuentran dos lugares de descanso aprovechando la sombra de los grandes pinos y demás árboles.
Urbanización accesible en el entorno arqueológico de Tomás Montis Sastre y Adrià Clapés i Nicolau. Fotografía por Lluís Bort.
Descripción del proyecto por Tomás Montis Sastre y Adrià Clapés i Nicolau
La intervención se localiza en la zona verde donde se encuentra «Sa Cova Son Caulelles» de Pòrtol (Marratxí, Mallorca) la cual yace sobre un terreno muy irregular. Esto es debido a la existencia de una antigua cantera de marés que el tiempo ha ido cubriendo por un manto de tierra vegetal y una frondosa vegetación donde destaca la existencia del Pino mediterráneo (pinus halepensis).
El emplazamiento objeto de la actuación está acotado por la calle Costa i Llobera, el Polideportivo municipal y la residencia geriátrica Son Caulelles, el cual pretende ser una extensión de esta última convirtiéndose en un parque arqueológico.
La propuesta consiste en una «promenade» sensorial y accesible, donde el usuario se envuelve de los singulares olores y colores de la vegetación mediterránea hasta llegar al mágico rincón patrimonial en el que se encuentra la cueva de marés de Son Caulelles. Esta experiencia transcurre por un recorrido adaptado que se ajusta a su accidentada e irregular topografía permitiendo a su vez superar los diferentes desniveles existentes. Además, ofrece un camino como si en la misma tierra se hubiese labrado y por ello éste se define por medio de una solera de hormigón desactivado color terroso. Al mismo tiempo y como si del mismo terreno hubieran aparecido, un bordillo de marés y un muro litoral de piedra seca (marge), muy común en los límites del entorno urbano-forestal del municipio de Marratxí, delimitan este sendero.
Siguiendo con esta tradición constructiva y paisajística del municipio referente al muro de piedra seca, tan característica de las Islas Baleares, el único lindero accesible desde la calle que dispone el proyecto se ha definido mediante este tipo de muro con caras a «pie de rey». Al mismo tiempo que genera la fachada del proyecto y define en sus dos extremos las dos entradas al recinto arqueológico mediante dos hitos (fites) de marés. La entrada principal es una prolongación de la residencia geriátrica por la que accede el usuario, mientras que la secundaria es el acceso para los trabajos de mantenimiento.
Por último, este parque arqueológico ofrece dos rincones maravillosos de descanso para los usuarios, uno junto al acceso en el cual un gran pinus halepensis le proporciona sombra las primeras horas del día y otro, un pequeño banco a modo de “ágora” ubicado en el final del recorrido y orientado hacia la Cueva de Son Caulelles.