Casa Luna por Pezo von Ellrichshausen. Abstracción geométrica de hormigón en el campo
06/05/2023.
[Santa Lucia Alto - Yungay] Chile
metalocus, ANDRÉS BLANCO
metalocus, ANDRÉS BLANCO
Casa Luna por Pezo von Ellrichshausen. Fotografía por Pezo von Ellrichshausen.
Casa Luna por Pezo von Ellrichshausen. Fotografía por Pezo von Ellrichshausen.
Casa Luna por Pezo von Ellrichshausen. Fotografía por Pezo von Ellrichshausen.
Descripción del proyecto por Pezo von Ellrichshausen
Este es un edificio grande y uno pequeño al pie de las montañas de los Andes. De hecho, es un agregado de doce edificios diferentes separados entre sí por juntas sísmicas visibles. Decir que esta colección de bloques de hormigón es una casa sería demasiado simple. Decir que es un palacio sería demasiado humilde. Más allá de su carácter secular, este conjunto de edificios es más bien un claustro.
Tiene un contorno severo, (una vez más) una planta cuadrada dividida por una cruz asimétrica, con habitaciones en el perímetro y en su núcleo. Estas habitaciones forman una extensión horizontal alrededor de cuatro patios distintos: uno alargado que sigue el terreno natural junto con el amanecer y el atardecer; otro largo totalmente plano y pavimentado orientado al norte; uno no direccional lleno de un jardín de flores circular; y uno más tres veces su tamaño que contiene un estanque y algunos árboles viejos.
El nombre de esta intrincada estructura viene dado por el tamaño de ese patio más grande, que es equivalente al tamaño de una plaza de toros (llamada medialuna en la tradición rural chilena).
Pezo von Ellrichshausen, Casa Luna, Yungay, pintura, 2020.
Pezo von Ellrichshausen, Casa Luna, Yungay, pintura, 2020.
La cualidad espacial de cada estancia, tanto interior como exterior, está marcada por aperturas singulares en múltiples direcciones, estableciendo así una tenue división funcional: casi no hay contraste entre las estancias para vivir y las de trabajo (desde la pintura hasta la jardinería). En algunos rincones hay acentos de intimidad, mientras que en otros el peso, el vacío y la opacidad se vuelven un tanto monumentales.
El formato alargado del sistema hace evidente la planitud horizontal de la cubierta, aunque con una transición casi imperceptible de una a dos plantas. Su presencia de fortaleza, a pesar de la exagerada falta de espesor de sus muros de hormigón, está dividida por estratos horizontales de cornisas regulares. En oposición a esas superficies rugosas, los muros del patio están coronados por atrevidos aleros, algunos de ellos redondeados, otros rectos.