El edificio se compone de dos volúmenes de diferente altura separados por un patio longitudinal con pasarelas exteriores por las que se produce el acceso a las viviendas, facilitando un mayor soleamiento y ventilación cruzada de todos los espacios.
El volumen 1, de planta trapezoidal, tiene una altura de PB+3. Cada planta acoge 2 viviendas de 2 habitaciones y 1 vivienda de 1 habitación, 9 en total. Los apartamentos se organizan en forma de abanico. El volumen 2, de planta rectangular y proporción alargada, presenta una altura menor, de PB+2, resolviendo así la transición con la edificación vecina de la calle Moreres a la que se adosa por su lado largo. Acoge 2 viviendas de 2 habitaciones cada una.
11 Viviendas de protección pública por Oliveras Boix Arquitectes + Cati Mestre. Fotografía por José Hevia.
11 Viviendas de protección pública por Oliveras Boix Arquitectes + Cati Mestre. Fotografía por José Hevia.
Descripción del proyecto por Oliveras Boix Arquitectes + Cati Mestre
El edificio hace esquina entre las calles Lleó XIII y Moreres. Se situa en una parcela de forma trapezoidal, edificable al 100%, con dos fachadas a calle y dos medianeras. Las edificaciones vecinas están constituidas por edificios de vivienda de alturas diversas: PB+1 en el caso de la calle Moreres y PB+2 / PB+3 en el caso de Lleó XIII. La esquina está orientada a norte, de manera que las dos fachadas a calle miran a noroeste (Lleó XIII) y noreste (Moreres).
La propuesta, que consta de 11 viviendas, 11 plazas de aparcamiento y 1 local comercial, se fija 3 objetivos:
- Conseguir la integración del edificio en su entorno resolviendo la diferencia de altura máxima normativa entre las calles Lleó XIII (PB+3) y Moreres (PB+2).
- Conseguir las mejores condiciones de ventilación e iluminación natural para las viviendas, en un solar con poco perímetro y con sus fachadas principales orientadas a norte.
- Conseguir la máxima calidad espacial y funcional de las viviendas.
El edificio se formaliza a través de dos volúmenes de diferente altura separados entre ellos por un patio longitudinal que a través de pasarelas exteriores resuelve el acceso a las viviendas y a la vez permite que estas disfruten de asoleo y ventilación cruzada. Esta franja libre también proporciona iluminación y ventilación al local situado en PB.
11 Viviendas de protección pública por Oliveras Boix Arquitectes + Cati Mestre. Fotografía por José Hevia.
A través de la plantación de enredaderas y árboles de hoja caduca, este patio orientado a sur se convierte en un espacio sombreado y fresco en verano mientras que en invierno recibe asoleo directo, mejorando las condiciones de confort interior de las viviendas en todas las épocas del año y contribuyendo al ahorro energético. A la vez, el patio y las pasarelas se convierten en un espacio comunitario y de intercambio que amplía y enriquece el espacio privativo de las viviendas favoreciendo la interacción social.
El volumen 1, de planta trapezoidal, tiene una altura de PB+3. Cada planta acoge 2 viviendas de 2 habitaciones y 1 vivienda de 1 habitación, 9 en total. Los apartamentos se organizan en forma de abanico. A través de la inserción de 2 patios de luces y gracias a la fachada sudeste, ganada con la apertura del patio longitudinal, se garantiza el asoleo de todas las viviendas y la posibilidad de ventilación natural de todas sus estancias. Integrado en este volumen se sitúa el núcleo de comunicaciones verticales del edificio.
El volumen 2, de planta rectangular y proporción alargada, presenta una altura menor, de PB+2, resolviendo así la transición con la edificación vecina de la calle Moreres a la que se adosa por su lado largo. Acoge 2 viviendas de 2 habitaciones cada una, una de ellas adaptada. Cada vivienda dispone de 3 fachadas, dos cortas y una larga dando al patio longitudinal. Se evita agotar la profundidad edificable, generando así una fachada posterior orientada a sudoeste.
En cuanto a la composición y el uso de los materiales la propuesta conecta con el lenguaje y las técnicas tradicionales de la isla a través del estuco de cal, la fábrica de marés, los pavimentos de cerámica y las persianas de librillo que, además de proporcionar la protección solar y la privacidad requeridas, propician la aparición del color.