La poética de Carme Pinós en el nuevo Crematorio del cementerio de Igualada
10/10/2017.
[Igualada-BCN] España
metalocus, JOSÉ FABERO
metalocus, JOSÉ FABERO
El crematorio por Carme Pinós se alza en una colina por encima del cementerio de Igualada. Oculto así desde el cementerio, integrado en la naturaleza y flores aromáticas pretende generar una atmosfera propia para permitir una despedida íntima.
Su forma escultórica se nutre de los materiales fúnebres convencionals, se mezclan así la estructura en hórmigon predominante y los acabados cerámicos.
Descripción del proyecto por Estudio Carme Pinós
El proyecto responde a la voluntad de integrarnos en el cementerio sin distorsionar la gran poética que emana de él.
Nos hemos situado en la parte superior de una colina que cubre la capilla y los servicios, de manera que desde el cementerio no se percibe la nueva edificación pero, en cambio, desde ella sí que percibimos la atmósfera y la belleza del cementerio.
La idea principal del proyecto ha sido la de entender con delicadeza la situación que implica el programa. Nuestro posicionamiento ha sido el de relacionarnos con la naturaleza generando un diálogo entre los visitantes y el paisaje lejano que se entrevé desde los ventanales del edificio.
También responde a esta voluntad la ubicación ligeramente elevada del crematorio, situado justo por encima de un conjunto de plantas aromáticas. Pretendemos dar la sensación de estar en un plano diferente a aquél donde transcurre la cotidianidad y que nos relaciona con la vida.
A pesar de que se podría considerar un edificio meramente técnico, hemos querido dotarlo de toda la poética que el estado de ánimo de aquellos que acuden a este espacio requiere.
Se han utilizado los materiales que relacionan el edificio con el cementerio. Por un lado, el hormigón, material predominante en el cementerio, confiere al crematorio un carácter más escultórico y, en cambio, el cerramiento cerámico le da una dimensión menos monolítica y más acogedora.
Carme Pinós i Desplat se tituló como arquitecta en la ETSAB en 1979. A mediados de los años 80, las propuestas arquitectónicas generadas por la pareja que hubiera formado junto a Enric Miralles comienzan a emerger y a resultar ganadoras de diversos concursos. Funda su propio estudio en 1991 y desde entonces ha compaginado su actividad como arquitecto con la docencia, siendo profesora invitada, entre otras, en la Graduate School of Architecture, Planning, and Preservation de Columbia University (1999), la École Polytechnique Féderale de Lausanne (2001-02), la Graduate School of Design de Harvard University (2003), la Accademia di Architettura di Mendrisio (2005-06) o la Universitá di Roma Tre (2007-08).
Sus obras y proyectos han sido expuestos de manera monográfica en diversas galerías y museos, y tanto el Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York como el Centro Pompidou de París poseen maquetas de sus proyectos en su colección permanente. Su obra ha sido objeto de diferentes monografías (Actar, 1998; Monacelli Press, 2004; “Documentos de Arquitectura”, nº 60, 2006). En 2008 fue galardonada con el Premio Nacional de Arquitectura y Espacio público del Departamento de Cultura de la Generalitat de Cataluña dedicado a toda una trayectoria profesional.