Las ventanas son las grandes protagonistas del proyecto, cuyo ritmo es el que pauta el dimensionado de los apartamentos y su organización interior, donde las estancias se establecen radialmente, y en las que queda reflejada la realidad constructiva, apostando por soluciones de bajo coste, con una estructura de hormigón complementada por carpinterías de aluminio negro que refuerzan el valor del vacío.
Bucaneli-Reurbano por Cadaval & Solà-Morales. Fotografía por Sandra Pereznieto.
Descripción del proyecto por Cadaval & Solà-Morales
Situado en la plaza del Reloj Chino, frente al Palacio de Gobernación y en una vía histórica de la Ciudad de México - la avenida Bucarelli fue durante más de 100 años la vía más importante de la ciudad-, el edificio de viviendas Bucarelli-Reurbano busca insertarse en un tejido urbano histórico generando identidad y calidad espacial.
La geometría del terreno, que construye la esquina externa de una plaza circular, así como la localización sobre un eje rodado emblemático de la ciudad, son los puntos de partida del diseño; la apuesta de incorporar vivienda en este enclave central de la ciudad, es un desafío programático y formal. El proyecto apuesta por construir una fachada continua y solida sobre la plaza circular, confiriendo solidez urbana a la plaza del Reloj; más aún, la propuesta abraza dicha geometría, y la desdobla para generar una secuencia de arcos concatenados y contrapuestos que en su iteración generan un patio central que es el corazón y el pulmón verde del proyecto.
La configuración edificatoria del contexto inmediato del edificio es desigual, con alturas distintas en los edificios contiguos - algunos de ellos patrimoniales que guardaran sus envolventes a futuro. Así, a pesar de la rigidez de la geometría circular en planta, su construcción tridimensional articula su volumetría para adaptarse a los edificios contiguos y a la diferencia de escala inherente a la plaza. El edificio se desgrana en su parte superior con una serie de aterrazamientos en altura que domestican la escala del edificio y lo integran en el lugar.
Bucaneli-Reurbano por Clara Solà-Morales. Fotografía por Sandra Pereznieto.
La definición de tipos estándares en un edificio de planta curva (que no circular) es difícil, más aún si se plantean tipos de tamaños y usuarios distintos. El proyecto asume la circulación central con apartamentos con dimensiones generosas de fachada para minimizar los accesos verticales y cualificar las unidades; la partición radial de la planta genera departamentos de proporciones cuadradas, y organizados de forma similar programáticamente independientemente de la dimensión de cada unidad. El ritmo de ventanas pauta el dimensionado de los departamentos y su distribución interior; las estancias se establecen radialmente accediendo por la parte del salón, aunque las divisiones interiores sean altamente flexibles. Más allá de la distribución espacial (abierta) de las estancias, el proyecto plantea una sistematización de los elementos estándares del apartamento: cocinas modulares, baños, armarios y cerramientos estandarizados. Se centralizan los puntos de agua y las comunicaciones verticales tangencialmente al pasillo central. La sistematización y simplificación define un catálogo tipológico de apartamentos acotado a pesar de la diversidad de tipos (desde 60 a 180m² por unidad); a parte, los departamentos que coronan el escalonado se plantean como espacios únicos con idiosincrasia propia (y con acceso a terrazas privadas).
La ventana es gran protagonista del proyecto; define la escala de la intervención, y construye un ritmo en fachada que es protagónico. La estructura de concreto se complementa con machones de bloque de cemento que construyen la malla donde se insertan las ventanas, de aluminio negro para reforzar el valor del vacío. El proyecto tiene una voluntad de mostrar su realidad constructiva y apostar por soluciones de bajo coste que se hacen aparentes. La construcción de 90 apartamentos, 5 locales comerciales, y 1 planta de estacionamientos en el centro de la ciudad buscan construir la monumentalidad desde un ajuste presupuestario y de esfuerzo.
El edificio forma parte de un esfuerzo por repoblar el Centro de la ciudad. Su presencia, es pues, contundente; su geometría es rotunda. El patio central, así como el resto de espacios comunes, quieren ser distintivos y aportar suavidad, color, frescura y confort al conjunto.