Mirando al acantilado. Villas La Escondida por Francisco Pardo Arquitecto
21/08/2020.
[Puerto Escondido - Oaxaca] México
metalocus, ANDRÉS ROJAS
metalocus, ANDRÉS ROJAS
Descripción del proyecto por Francisco Pardo Arquitecto
Ubicado entre vegetación, el proyecto respeta el medio ambiente reflejando la pendiente del sitio con su inclinación de 20° a 40°, a través de una secuencia de escalonamientos, rotaciones y patios intermedios. Se establece un patrón replicable estándar, que permite vistas de 180° y mucha luz natural y ventilación en cada unidad, gracias a un diseño complejo y alternativo que ofrece a los residentes una experiencia única.
“Esta disposición de vivienda se adapta naturalmente a la topografía existente. Las villas buscan generar una simbiosis armónica entre la arquitectura, el océano Pacífico y los habitantes, realzada por extraordinarias vistas panorámicas de los alrededores”.
Francisco Pardo, fundador del estudio.
El complejo consta de 16 residencias de 150 m² más la terraza de 70 m² sobre la unidad inferior. A pesar de la alta densidad del lugar, los apartamentos, incrustados en la ladera de varias formas, se sienten más como villas que como apartamentos.
Cada unidad consta de dos o tres dormitorios, una sala de estar y comedor de planta abierta y una terraza privada, que enmarca el paisaje idílico y el horizonte del mar, al tiempo que garantiza la máxima privacidad a través de las extensas plantas estratégicamente ubicadas alrededor de sus perímetros.
Cada apartamento tiene una pequeña piscina privada, y tres tipos de áreas comunes se encuentran en las azoteas superiores: al Este (la más alta), un bar y área de descanso; en el centro, la piscina principal con solarium; y al oeste, una piscina más pequeña para niños.
Se accede a los apartamentos a través de un sistema de calles naturales y dos jardines que reproducen la pendiente natural del terreno y se extienden hasta el mar. La brisa del mar, en sinergia con la sombra que brindan los techos en voladizo y la ventilación cruzada generada por la terraza y los muros laterales, brinda opciones de enfriamiento pasivo.
En el interior, las unidades ofrecen un lugar confortable para relajarse y refugiarse del sol. La madera de tonos naturales envuelve los interiores exquisitamente hechos a medida, agregando calidez visual y reforzando la conexión con el contexto natural.
Las Villas de La Escondida están construidas íntegramente con una estructura simple de hormigón armado, muros de bloques, cemento, arena y losas nervadas. Este sistema ha permitido una construcción flexible y una estructura sólida, resistente a los sismos característicos que afectan la zona. Los principales acabados de las fachadas externas e interiores están realizados con Chukun, aplanado con cemento de arena fina y la sugerente madera local “Macuil”.
En lugar de invadir el paisaje, este proyecto original que desciende hacia la playa para atrapar la brisa del océano, está destinado a integrarse en el sitio cubierto de vegetación, enfatizando la conexión de la arquitectura con su entorno natural.