
En pos de lograr una mejor integración entre los barrios y la ciudad, el equipo de arquitectos integrado por BAAS y ESPINET/UBACH, optó por la construcción de dos paseos que, horizontalmente, atraviesan la parcela de lado a lado, conectando los barrios de Montbau y Sant Genís. Complementariamente, un nuevo eje de circulación vertical aporta una mejor conexión tanto para el Campus como para la ciudad.
Un gesto en la topografía resume el primero de los edificios que inicia esta transformación ambiciosa. Empotrado en la montaña, el proyecto se concibe como un pliegue en la topografía que se vuelve inadvertido en el nivel superior, dando como resultado una extensión del paisaje de la montaña de Collserola. Integrando espacios interiores y exteriores, el proyecto organiza su funcionamiento en torno a tres patios, generando diferentes espacios de ocio y de encuentro.

VHIR Centro de Investigación Campus Vall d’Hebron por BAAS + ESPINET/UBACH. Fotografía por Gregori Civera.
Descripción del proyecto por BAAS + ESPINET/UBACH
El proyecto parte de una reflexión general sobre el Campus Hospitalario, que en la actualidad es un caos de construcciones en desorden con graves problemas de accesibilidad.
La propuesta quiere construir un gran parque conectado con los barrios adyacentes y la ciudad, mejorando la accesibilidad y la permeabilidad del sitio. Para ello, proponemos una serie de estrategias:

1. Esponjar el recinto, derribando algunos edificios obsoletos y colocando su programa en edificios semi-enterrados para devolver el Campus a su condición de parque natural con edificaciones.
2. Construir dos grandes paseos planos que atraviesen el solar horizontalmente y lo conecten con los barrios de Montbau y Sant Genís.
3. Crear un nuevo eje vertical de acceso mediante escaleras mecánicas que solucione la accesibilidad tanto del Campus como de los barrios adyacentes.

El primero de los edificios que inicia esta gran transformación es el centro de investigación del Vall d'Hebron VHIR. Se trata de un edificio empotrado en la montaña con una sola fachada. Un pliegue de la topografía que quiere ser un telón de fondo de la plataforma inferior y que desaparece literalmente desde el nivel superior donde se convierte en una prolongación del paisaje de la montaña de Collserola.

La planta está definida por tres patios, uno de los cuales se abre en la fachada y construye una plaza, y unas terrazas que recorren toda la fachada y relacionan los laboratorios con el exterior. Los laboratorios, agrupados en torno a los tres patios, generan una serie de recorridos, combinando interiores y exteriores para generar espacios de ocio y encuentro.