Como líder del proyecto, el director de
OMA Shohei Shigematsu pasará el próximo año, en colaboración con el museo y en consulta con la comunidad para desarrollar una nueva visión para una renovada y revitalizada
Albright-Knox. El proyecto, de 80 millones de dólares, el más grande jamás realizado por una organización cultural en el oeste de Nueva York transformará significativamente el museo, enriqueciendo el legado arquitectónico de Buffalo, y fortaleciendo su vida cultural y económica y de toda la región.
"Nuestro proceso de selección debía enfoques creativos para los retos de la ampliación y remodelación de la Albright-Knox," dijo el Presidente de la Junta de Albright-Knox Tom Hyde.
"Como premisa principal estábamos buscando auténtica sensibilidad con nuestros edificios históricos y el campus Olmsted, que anclan el cada vez más vibrante distrito cultural Elmwood Avenue. OMA / Shohei Shigematsu han demostrado sus enfoques creativos para la construcción en sitios complejos, como el reciente Museo Nacional de Bellas Artes de Quebec, que también conecta zonas verdes y paisaje urbano".
Shohei Shigematsu comentó: "Estamos encantados de ser parte de este proyecto, que será importante por muchas razones, entre ellas la convergencia del significado histórico de la arquitectura de Buffalo, el fomento de un diálogo más íntimo con el paisaje Olmsted, respondiendo a la necesidad de un nuevo espacio de exposición para visualizar la famosa colección de Albright-Knox, y el posicionamiento del museo para asumir un papel protagonista en el resurgimiento de la ciudad ".
El proceso de selección de la Albright-Knox se llevó a cabo en colaboración con Andrew Bast y Susan Wallace de Zubatkin Owner Representation, LLC. El Albright-Knox y OMA / Shohei Shigematsu se embarcarán en la siguiente fase del proceso de ideación en septiembre de 2016.
Tras el anuncio del proyecto en Buffalo, un evento relacionado se llevará a cabo durante la feria de arte Art Basel en Basilea, Suiza. La directora Peggy Pierce Elfvin y Shohei Shigematsu de OMA, y el artista Mark Bradford discutirán el futuro de los museos de arte y su papel como agentes de cambio social. El evento, que es gratuito con la entrada al museo, se lleva a cabo en la Fundación Beyeler a las 5 de la tarde del miércoles, 15 de junio.
Antecedentes del Proyecto AK360
Desde hace más de una década, el Albright-Knox ha explorado la posibilidad de ampliar y mejorar sus instalaciones. Estas mejoras se necesitan con urgencia para albergar adecuadamente la creciente colección del museo, permitir el montaje de exposiciones temporales especiales, y presentar un rango dinámico de programas educativos complementarios. En 2014, el directorio del museo decidió por unanimidad iniciar un ambicioso proyecto de desarrollo del campus que permitirá a la institución materializar su potencial en el oeste de Nueva York.
El nombre AK360 refleja el hecho de que esta será la tercera vez que el Albright-Knox ha crecido a lo largo de sus 154 años de historia, una vez cada intervalo de aproximadamente sesenta años (en 1905 con su primer hogar permanente y en 1962 con su última ampliación). El nombre también manifiesta el deseo del museo de recibir feedback de la comunidad. Marca la dedicación por parte de la institución para mirar más allá de sus necesidades operacionales urgentes y toma una visión de 360 grados desde su posición dentro de Parque Delaware de Frederick Law Olmsted como una célebre fuente cultural de su región y como un contribuyente vital para la reactivación del Oeste del Estado de Nueva York.
El Albright-Knox tiene un tesoro insustituible de obras maestras modernas y contemporáneas, una de las mejores colecciones de su tipo en el mundo. Pero una escasez crónica de espacio limita la posibilidad de exponer y conservar este tesoro cultural y cívico. Desde la pasada ampliación del museo en 1962 la colección ha cuadruplicado su tamaño y ahora contiene más de 8.000 obras, de las cuales solamente se pueden exponer al mismo tiempo entre 200 y 300. El proyecto AK360 duplicará el número de obras maestras que el museo puede mostrar y también proporcionará espacio para la presentación de exposiciones especiales. El proyecto mejorará la experiencia del visitante en el museo, creando más espacio para la educación, restaurantes y actividades sociales e integrando mejor el campus con el paisaje del parque de Delaware de Olmsted. Para financiar el proyectose ha puesto en marcha una campaña de capital que servirá también para ayudar a generaciones futuras a conservar y ampliar el museo.