El proyecto de viviendas de La Borda, desarrollado por la cooperativa de arquitectos Lacol, comienza en el año 2012 en el marco de la recuperación comunitaria de Can Batlló, donde un grupo de vecinos y vecinas deciden auto-organizarse para resolver de manera colectiva la necesidad de acceso a la vivienda a partir de la implementación de una cooperativa de vivienda en cesión de uso.

Can Batlló, o la antigua Fábrica de Joan Batlló, es un antiguo complejo industrial situado cerca de la Gran Via de les Corts Catalanes, cerca de la plaza conocida como Plaça Cerdà, al sur de Barcelona, España. Estaba compuesto por las instalaciones habilitadas para la fábrica textil creada en 1878 por Joan Batlló i Barrera.
La cooperativa de arquitectos Lacol se involucró desde el inicio de la promoción, empujados por la motivación de construir una alternativa en un contexto de grave crisis habitacional en Barcelona, con la participación de las futuras usuarias.

El proyecto, que ha llegado a ser el edificio más alto de España construido en madera, se emplaza en un solar (VPO) cedido por el ayuntamiento a 75 años en la calle Constitución, situado en una posición limítrofe del recinto industrial de Can Batlló con fachada a la trama histórica del barrio de la Bordeta.

El edificio cuenta con grandes espacios comunes para fomentar formas de convivencia que potencien la interrelación de los usuarios y para establecer vínculos de cooperación en el ámbito del trabajo doméstico y los cuidados.
 

Descripción del proyecto por Lacol

Este texto describe aquellas características del proceso de promoción de la cooperativa de viviendas La Borda que han marcado el planteamiento y desarrollo del proyecto arquitectónico.

La apuesta de La Borda por un modelo comunitario antagónico a las promociones estatales o privadas ha permitido superar algunas de las grandes limitaciones que se imponen a los proyectos de arquitectura. En el primer caso el miedo al futuro usuario, que es totalmente desconocido, imposibilita introducir cambios que puedan afectar a la manera de vivir estandarizada. En el segundo caso, se imponen las lógicas del mercado que mediocratizan la vivienda para facilitar su asimilación a un objeto de consumo.

La innovación del proceso de promoción ha sido clave para poder trabajar la arquitectura más allá de su formalización. Del modelo se identifican cinco características que tienen una respuesta directa en el proyecto: autopromoción, cesión de uso, vida comunitaria, sostenibilidad y asequibilidad.

1 autopromoción

Las socias de la cooperativa, y futuras usuarias, son las que dirigen, controlan y desarrollan todo el proceso de promoción mediante una estructura interna que fomenta su participación directa con comisiones de trabajo y una asamblea general mensual. La cooperativa sólo tiene el apoyo de equipos técnicos especializados en las tareas que no puede asumir por parte sus socias.

La implicación de las futuras usuarias es una de las mayores singularidades y potencialidades para el desarrollo del proyecto arquitectónico ya que es la gran incógnita en todos los proyectos de vivienda colectiva, y se convierte en el punto de partida del proyecto.

El conocimiento exhaustivo del futuro habitante y de sus necesidades reales ha puesto en cuestión los patrones de usuarios tipo pre-establecidos y la normativa relativa a la vivienda para adecuar toda decisión a los requerimientos concretos de la cooperativa.

Se ha integrado la participación activa del usuario en todas las fases: diseño, construcción y gestión del edificio. El futuro habitante participa en el diseño colaborativo del conjunto del edificio mediante talleres temáticos que permiten aprovechar la inteligencia colectiva del grupo humano, y co-responsabilizar al usuario de las decisiones del proyecto. Estos procesos aumentan la concienciación y formación y estimulan el sentimiento de comunidad y pertenencia.

2 cesión de uso y propiedad colectiva

La cooperativa es la propietaria del edificio, construido sobre un solar de titularidad pública, y cede el derecho de uso de las vivienda a sus socias, agrupadas en unidades de convivencia. Mediante este modelo de tenencia alternativo a la propiedad privada se pone el valor únicamente en el uso de la vivienda, y no en su valor de cambio en el mercado, para evitar usos especulativos.

El hecho de situar el valor de uso y la colectividad en el centro, ha llevado a pensar el edificio como una infraestructura abierta donde el propio uso sea lo que acabe configurando la arquitectura en el tiempo, y se adapte a la evolución de la comunidad ya las necesidades cambiantes de las usuarias. La gestión del edificio se realiza por la misma comunidad.

La infraestructura común (soporte) se define a partir de una matriz homogénea de unidades habitacionales (16m²) que genera una tipología de vivienda no jerarquizada y apropiable para cada usuario mediante decisiones libremente adoptadas (componentes).

3 vida comunitaria

La Borda quiere fomentar formas de convivencia más comunitarias que potencien la interrelación entre las personas habitantes a través de los espacios comunitarios, y establecer vínculos de cooperación en el ámbito del trabajo doméstico y los cuidados visibilizando las esferas privadas de la vida cotidiana. El edificio de La Borda contempla un 25% de la superficie construida para espacios comunes, a diferencia de los edificios plurifamiliares convencionales donde suele ser aproximadamente el 10% y donde se reducen los espacios de circulación para conectar la calle con la puerta de cada vivienda. Se cuenta con una cocina comunitaria de 80 m² donde hacer comidas de gran formato o convertirse en punto de encuentro, un espacio polivalente cubierto de 100 m², dos habitaciones para invitados, una lavandería y un gran espacio central de circulación, aparcamiento de bicicletas y terrazas exteriores.

Estos espacios comunitarios tienen una triple función. Por un lado, dotar al edificio de espacios de encuentro donde potenciar la relación entre usuarias y generar unos espacios entre el espacio público exterior y el espacio más íntimo de las viviendas. También economizar recursos, haciendo que ciertas infraestructuras no tengan que estar multiplicadas por 28 viviendas, sino que se puedan centralizar mejorando la sostenibilidad económica y ambiental. Al mismo tiempo, permiten aumentar mucho la superficie utilizable por todos los socios, pudiendo disfrutar con la misma superficie total y el mismo coste de muchos más espacios que en una promoción convencional.

Esta premisa obra la posibilidad de repensar el programa de la vivienda colectiva para adaptarlo al modelo de vida que imaginan las futuras usuarias. Se rompe con el esquema del edificio como resultado de la suma de unidades individuales, para entenderlo como una sola casa compartida donde se desdibuja el límite entre el espacio privado y el comunitario.

4 sostenibilidad

La cooperativa priorizó realizar un edificio con el mínimo impacto ambiental, tanto en su construcción como en su vida útil. Otro objetivo básico es eliminar la posibilidad de pobreza energética entre sus usuarias, situación que sufrían algunas de ellas debido al elevado coste de la energía y falta de recursos económicos. La estrategia inicial del proyecto para reducir la demanda energética ha sido la optimización del programa, renunciando al aparcamiento de coches subterráneo, colectivizando servicios y reduciendo la superficie de las viviendas.

En el ámbito del diseño se han introducido el máximo de parámetros bioclimáticos para conseguir un edificio muy pasivo, con soluciones que implican una acción activa de los usuarios en la gestión climática de la vivienda. El resultado es un consumo energético casi nulo, y por tanto, el confort en las viviendas con el mínimo coste asociado.

La primera acción para reducir de forma considerable el impacto ambiental del edificio fue conseguir no realizar aparcamiento subterráneo para automóviles. Sólo los impactos directos en la construcción y el uso a 75 años permitirán un ahorro de entre 500 y 800 toneladas de CO2. Además esta estrategia conlleva un beneficio directo en la movilidad sostenible y en la reducción de la huella ecológica de las personas habitantes.

La estructura de seis plantas de altura es de madera contralaminada (CLT). Este es un material ligero, de alta calidad, renovable en el medio que permite cerrar ciclos, a diferencia de materiales convencionales de la construcción como el acero o el hormigón, que la sus producciones tienen un coste energético muy elevado y no son renovables. Actualmente la Borda es el edificio construido con estructura de madera laminada más alto de España.

En cuanto a la reducción de la demanda, por un lado se han reducido las superficies de las viviendas que necesitan un confort elevado, transfiriendo una parte a los espacios comunitarios donde la demanda asociada al confort es más discrecional. También se han desarrollado hasta su máxima expresión las estrategias bioclimáticas pasivas. Así, se ha diseñado el cubrimiento del patio con un invernadero que permite captar la radiación solar en invierno y hacer efecto chimenea para forzar la ventilación en verano. A esto se añade una buena estanqueidad al aire, trabajar con la inercia de los materiales y una especial atención en el aislamiento térmico.

La Borda cuenta también con un sistema centralizado de generación térmica para el agua caliente y la climatización por medio de una caldera de biomasa, permitiendo optimizar la infraestructura de producción y mejorando el rendimiento y la tecnología al servicio de todo el edificio. Al mismo tiempo se consigue tener un consumo energético sin materias fósiles y totalmente renovables.

5 asequibilidad

Una condición imprescindible de la cooperativa es garantizar el acceso a una vivienda digna y asequible para convertirse en una alternativa accesible para rentas bajas. Las dificultades de financiación hacen que el coste de la construcción sea un factor determinante para establecer el valor de la cuota mensual.

Se ha dado respuesta planteando dos fases de obra para minimizar la inversión inicial. La primera para conseguir los mínimos habitables que permitan entrar a vivir en el edificio y una posterior donde la comunidad puede ir completando el conjunto en el tiempo.

Leer más
Contraer

Más información

Label
Arquitectos
+ + copy Created with Sketch.
- + copy Created with Sketch.
Label
Colaboradores
Text
Arkenova (ingeniería), Miguel Nevado (estructura), AumedesDAP (control de costes y DEO), Societat Orgànica (consultoría ambiental), PAuS - Coque Claret y Dani Calatayud (consultores proyecto), Grisel·la Iglesias - Àurea acústica (acústica), José Juan Martínez Larriba (project manager), La Ciutat Invisible (coordinación de la promoción) y Holon (diseño de servicios).
+ + copy Created with Sketch.
- + copy Created with Sketch.
Label
Cliente
Text
La Borda, cooperativa d’habitatges en cessió d’ús.
+ + copy Created with Sketch.
- + copy Created with Sketch.
Label
Superficie
Text
Superficie construida.- 3.000 m².
+ + copy Created with Sketch.
- + copy Created with Sketch.
Label
Fechas
Text
Proyecto.- 2014. Ejecución.- febrero 2017 - octubre 2018.
+ + copy Created with Sketch.
- + copy Created with Sketch.
Label
Localización
Text
Constitució 85-89, Barcelona, España.
+ + copy Created with Sketch.
- + copy Created with Sketch.
Label
Fotografía
Text
Lluc Miralles, Gabriel Lopez, Anna Bosch Miralpeix, Lacol, Chopo, La Borda, Antonio Navarro Wijkmark, Institut Municipal de l’Habitatge i Rehabilitació de Barcelona.
+ + copy Created with Sketch.
- + copy Created with Sketch.
Lacol es una cooperativa de arquitectura creada en 2014 en el distrito de Sants (Barcelona). Trabajan con la arquitectura para la transformación social, como herramienta para intervenir críticamente en el entorno inmediato.

Actualmente, es un equipo de 14 personas que trabajan en diversos campos de la arquitectura. Sus líneas de trabajo se centran en estos cinco ejes: Construcción; Vivienda Cooperativa; Participación; Exposiciones y Escenografía; y Urbanismo.

El eje principal de trabajo sobre el que aplican los conocimientos de otros campos es la vivienda cooperativa. Se han especializado en la promoción de este modelo así como en el proceso de participación de la promoción de los futuros habitantes. El caso más relevante ha sido la cooperativa de vivienda La Borda, donde, además de realizar el proyecto arquitectónico, han participado en su promoción y se ha sistematizado todo el proceso de aprendizaje a través del libro «Habitar en comunidad» (Libros de la Catarata , 2018).

Actualmente están construyendo La Balma, una cooperativa de vivienda similar en Poblenou, y acompañando varios proyectos en fase de promoción en otros lugares.

Con el fin de promover y viabilizar la replicabilidad del modelo, trabajamos en el diseño de políticas públicas, asesoramos a los municipios, impartimos conferencias y redactamos artículos en diferentes publicaciones. Lacol forma parte de La Dinamo, fundación para la consolidación de la vivienda cooperativa en Cataluña.

Premios
•    Premio «Ciutat de Barcelona» 2018.
•    Premio a la Construcción Edificada en Arquitectura en el BBConstrumat 2019.
•    Nominado al Premio Début de la Trienal de Lisboa (anunciado el 5 de octubre de 2019).
•    Mención en los premios Bonaplata 2018 por un estudio sobre el patrimonio industrial de Vilassar de Mar.
•    Premio AJAC por el proyecto de cooperativa de vivienda “Coop de falç”, junto con Arqbag.

Libros publicados por Lacol
•    «Construir en col·lectiu» (CAT / ESP / ENG), Pol·len Edicions 2018.
•    «Habitar en comunidad», con La Ciutat Invisible, Libros de la Catarata / Arquia, 2018.
•    «El Vilassar de Mar Fabril». Ediciones de Pagès, 2018.
•    «Inventari de Can Batlló. Teixint una història col·lectiva». Comisariada por Lacol. Riera de Magòria, 2013.
Leer más
Publicado en: 20 de Agosto de 2020
Cita: "Decidir en comunidad. Cooperativa de vivienda La Borda por Lacol Arquitectura Cooperativa" METALOCUS. Accedido el
<https://www.metalocus.es/es/noticias/decidir-en-comunidad-cooperativa-de-vivienda-la-borda-por-lacol-arquitectura-cooperativa> ISSN 1139-6415
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...
Loading content ...