El centro en realidad es un collar que enlaza una serie de «pabellones» de ladrillo rojo que albergan diversos espacios sociales y de atención caracterizados por sus grandes chimeneas que establecen un interesante diálogo con las edificaciones vecinas del siglo XVII. La conexión se realiza a través de un «claustro» central de madera o camino cubierto cuya cubierta está revestida de zinc.
El premio se presentó inicialmente en 1996 y tiene como objetivo reconocer las mejores propuestas arquitectónicas en el Reino Unido. Es la primera vez que Mae Architects, seleccionada entre un grupo de 6 proyectos preseleccionados, y que también fue preseleccionado para el premio del año pasado, gana el máximo honor del Reino Unido.
Centro John Morden por Mæ. Fotografía por Jim Stephenson.
Descripción del proyecto por Mæ Architects
El centro John Morden es un centro de cuidados para residentes de Morden College. Reúne las instalaciones que actualmente se encuentran dispersas por el campus de la universidad en un nuevo edificio innovador y con carácter proyectado para abordar el aislamiento social entre los residentes mayores al brindarles espacios para interactuar.
Morden College es un asilo de beneficencia catalogado de Grado I en Blackheath, Londres, fundado en 1695 por Sir John Morden y construido por el maestro constructor y sucesor de Sir Christopher Wren, Edward Strong. El nuevo edificio hace referencia a la arquitectura histórica en su columnata, tejado y ladrillo.
Los espacios públicos del colegio –comedor, capilla, biblioteca– forman adiciones al cuadrilátero principal conectados por una columnata. Los generosos espacios sociales del nuevo edificio también están unidos por una columnata serpenteante, que forma una columna vertebral de circulación y abre conexiones con jardines paisajísticos.
Cada parte del edificio tiene un techo distinto y una chimenea para ventilación apilada que hace eco del perfil de los edificios vecinos.
«El Centro John Morden se encuentra en el corazón de la universidad, un centro de vida y actividad. Un lugar que no solo inspira a nuestros residentes a pasar tiempo allí, porque el tiempo que pasen en el Centro John Morden les permitirá sentirse bien consigo mismos y con la vida. ; pero también un lugar que inspira a nuestro personal a preocuparse aún más. Los residentes que ingresan al Centro John Morden se encuentran en un lugar que reconoce su importancia».
David Rutherford-Jones, director ejecutivo de Morden College