Exteriormente, el proyecto destaca por un zócalo rematado con colores neutros sobre planchas de acero y elementos prefabricados de hormigón que proporcionan un contraste en las bandejas metálicas superiores con el color azulgrana del equipo. A su vez, la fachada de la tribuna se dispone como un elemento móvil y dinámico, revestido por una piel exterior de discos circulares de aluminio anodizado.
Descripción del proyecto por Batlle i Roig Arquitectura
Sin duda uno de los proyectos más singulares finalizados este 2019 es el nuevo Estadio Johan Cruyff del FC Barcelona, que forma parte de la ampliación de la Ciudad Deportiva Joan Gamper, dentro del conjunto de operaciones del Espai Barça. El programa contempla la construcción de un nuevo estadio para albergar partidos del equipo filial, el femenino y el juvenil.
Con una capacidad para 6.000 espectadores, un aforo relativamente reducido, el estadio se podría haber resuelto con una única gradería baja. Aun así, la voluntad de diseñar un estadio de alto nivel —cumpliendo con los requerimientos de un estado UEFA Cat. III— obligó a disponer de una tribuna con una altura superior a la del resto del estadio donde integrar los requerimientos tecnológicos de televisión, iluminación, zonas vip, etc.
La propuesta hace de un problema una virtud e integra esta importante asimetría en un único gesto, generando una percepción unitaria dentro del conjunto y configurando la imagen icónica del proyecto.
Esta imagen asimétrica también se relaciona con la historia del club, no sólo por el hecho de llevar el nombre de la leyenda que simboliza el ideario del juego, sino también porque el nuevo estadio recuerda la imagen del primer campo de juego del FC Barcelona, el campo de la Calle Industria. Éste seguía la tradición de los primeros estadios, cuando aún no había una tipología definida, y cuando la solución habitual era la más obvia: situar un edificio en el lado largo del terreno de juego desde el que ver el partido.
Con 137,5 metros de longitud y 110 metros de ancho, el nuevo Estadio Johan Cruyff sigue la esta idea antigua de edificio-tribuna donde alojar la mayor parte del programa, y una cubierta baja en forma de U, que cierra los tres lados restantes.
De esta manera se consigue cubrir la totalidad de las gradas, que envuelven el terreno de juego, sin interrupciones en las esquinas, generando así la máxima proximidad entre jugadores y espectadores.
La transición entre los dos elementos (la cubierta baja y el volumen de tribuna) se logra mediante un sutil gesto que convierte el remate de la cubierta baja en la barandilla de la tribuna y permite generar una cinta interior que abarca el terreno de juego. Siguiendo con la idea de abrazar a los jugadores y crear un ambiente de comunidad, se decide también ocupar los córners con asientos —al contrario que en muchos otros campos— y permitir así que la zona de contacto entre jugadores y espectadores sea máxima.
El edificio sigue la orientación ortogonal de la Ciudad Deportiva y se adapta a la topografía existente del solar y las calles colindantes.
Por este motivo, la urbanización exterior se distribuye en dos grandes plataformas que envuelven el estadio. En la cota inferior se encuentra el acceso peatonal principal, formalizando una plaza de carácter cívico, enmarcada por la fachada principal del estadio y la masía rehabilitada de Can Felip. En este nivel se encuentran los accesos de personal de prensa, VIP y personal interno del club. Subiendo por la gran rampa para peatones se conecta con la cota superior +24,35 m que rodea el perímetro del estadio. En esta plataforma se concentran la mayoría de espacios de aparcamiento en superficie, y es desde donde se accede al interior del estadio, a través de accesos situados en las cuatro esquinas. Es el nivel por el que los espectadores se distribuyen hasta llegar a sus localidades.
Siguiendo los cánones clásicos de los teatros griegos, el espectador siempre accede a su asiento desde la cota superior. Este gesto proporciona una visión general del estadio desde su llegada, mejorando la comprensión del espacio por parte del usuario.
Las gradas se disponen en dos niveles, con el objetivo de proporcionar las mejores visuales para todos los espectadores y la mayor proximidad al campo. La comunicación vertical se realiza a través de escaleras exteriores para el público general y una escalera central con dos ascensores para el público VIP, prensa y operaciones internas. Este núcleo comunica las diferentes plantas del edificio tribuna donde se distribuyen los usos principales, organizados por niveles, según grupos de usuarios.
La imagen exterior del estadio se caracteriza por disponer de un zócalo de colores neutros a base de elementos prefabricados de hormigón y planchas de acero plegadas perforadas; que contrasta con la envolvente de bandejas metálicas de color grana en las plantas superiores. En la fachada principal de la tribuna, se desarrolla la fachada dinámica, una segunda piel ligera a base de discos circulares de aluminio anodizado del diámetro de una pelota de futbol.
Éstos admiten que la presión del viento los mueva ligeramente, obteniendo una sábana que dibuja lo invisible, el movimiento del aire, y que nos recuerda que en el estadio la pelota siempre se mueve, incluso cuando está vacío.
Esta piel de círculos se extiende a lo largo de toda la longitud de la fachada oeste y ofrece una protección solar —en los espacios VIPS y de prensa—, a la vez que genera un soporte para transmitir mensajes con una gran presencia desde el exterior y donde se ha inscrito el nombre del estadio.
La tecnología y la innovación se materializan en un sistema LED de alumbrado del terreno de juego de muy bajo consumo y con prestaciones que muchos estadios de Champions League no tienen. También es innovadora la solución para el terreno de juego con un sistema de hierba híbrida, que permite disponer de las mejores condiciones del terreno de juego, y que se traduce en una reducción de las lesiones de los jugadores.
De esta manera, el proyecto del nuevo Estadio Johan Cruyff se consolida como un conjunto icónico, sin necesidad de estrategias complejas ni superfluas, vinculado al club, a sus colores y a sus valores. Pensado para dar el mejor confort a los jugadores, y los mejores servicios a los espectadores.
Un estadio con nombre de leyenda, cuna de las estrellas futbolísticas del mañana.
“Un nuevo estadio moderno y eficiente para los equipos emergentes del FC Barcelona. Una arquitectura icónica para transmitir los valores del Club: un edificio acogedor, honesto, inclusivo, smart y sostenible”.