Cuando se habla de bibliotecas viene a la mente lugares de lectura y estudio donde reina el silencio y la concentración, dentro de un ambiente de paz y sosiego, pero una biblioteca no solo se caracteriza por su función dentro de la sociedad, sino también por la concepción dentro de la trama urbana que puede transmitir a nivel arquitectónico.
Es por eso que presentamos 10 bibliotecas clásicas que deberías conocer con el fin de mostrar como estas increíbles estructuras pueden influir en la vida de la sociedad a través del tiempo solo mediante su composición arquitectónica, sus juegos de luces, su materialidad o su desarrollo constructivo a lo largo del tiempo.
Es por eso que presentamos 10 bibliotecas clásicas que deberías conocer con el fin de mostrar como estas increíbles estructuras pueden influir en la vida de la sociedad a través del tiempo solo mediante su composición arquitectónica, sus juegos de luces, su materialidad o su desarrollo constructivo a lo largo del tiempo.
La Biblioteca Beinecke de Libros Raros y Manuscritos, perteneciente a la Universidad de Yale, en New Haven, Connecticut, en Estados Unidos, fue construida entre 1960 y 1983 bajo los mandos de Gordon Bunshaft, de la firma de Skidmore, Owings y Merrill y modernizada en 1990, siendo proyectada como uno de los edificios más grandes del mundo dedicados a libros y manuscritos, albergando 180 mil ejemplares en la torre central, 600.000 en las estanterías, más 500.000 volúmenes junto a varios millones de manuscritos, por lo que el control de luz y temperatura juega un papel importante dentro del proyecto con el fin de conservar y proteger lo mejor posible todo este material.
Esta biblioteca se construyó como respuesta al interés que se había comenzado a crear a finales de 1950 por los libros raros y las colecciones especiales, por lo que Gordon Bunshaft proyectó un edificio con mármol de Vermont y granito, bronce y cristal, cada material pensado para complementar con el siguiente, además de contrastar sobre el resto de edificaciones más antiguas de la Universidad Hewitt, pero no solo por su composición material, sino también por su función como centro de investigación para todo el público.
El proyecto comienza introduciendo el acceso principal mediante una puerta de cristal giratoria, que da pie a una torre de cristal donde se almacenan en altura miles de libros como núcleo central del espacio, el cual se divide en dos a través de escaleras a cada lado de la entreplanta, creada como punto de exposición de las colecciones de la biblioteca. Por debajo del suelo se puede encontrar un centro de investigación como uno de los espacios más reducidos donde se albergan gran cantidad de áreas como pueden ser espacio para oficinas, estanterías, aulas, un área de estudio, y un patio jardín diseñado por Isamu Noguchi, y cuyo techo funciona a modo de plaza y punto de referencia dentro de la Universidad, ya que el conjunto del proyecto se podría representar como un gran cubo de mármol expositivo.
En 1927, se convocó a concurso la construcción de una biblioteca municipal en la entonces ciudad finlandesa de Viipuri, que ganó Alvar Aalto a través de un diseño que no acabó por determinarse hasta 1935 debido a diversas modificaciones. Finalmente la biblioteca se construyó con un diseño funcionalista y moderno, representativo del arquitecto en sus proyectos de la época anterior a la guerra, ofreciéndole estas, poco a poco, reconocimiento a nivel mundial y la posibilidad de exponer, en 1938, diversos diseños, del Estilo Internacional, de su arquitectura en el Museo de Arte Moderno (MoMA).
Pero, debido sobre todo a la Segunda Guerra Mundial, al cambio de fronteras, pasando Viipuri a ser Vyborg bajo el control de la Unión Soviética, la biblioteca resultó dañada y posteriormente abandonada sin posibilidad de restauración hasta 1950, donde se realizaron una serie de restauraciones poco estudiadas en referencia a las técnicas y diseño de Alvar Aalto, por lo que poco a poco, a partir de 1970 y 1980, con la disolución de la Unión Soviética, se fue creando un deseo de conservación de los valores arquitectónicos originales, estudiando las necesidades del edifico. Es en 1992, cuando se crea el Comité de Finlandia para la Restauración de la Biblioteca de Viipuri, dando paso su la entrada en el World Monuments Watch en 2000 y 2002, entidad que a través de una gran donación propició la restauración de una gran parte de elementos de la sala de lectura y la biblioteca de préstamo, terminando de forma oficial la restauración en 2013.
Y no es hasta el siguiente año, 2014, que a través del World Monuments Fund (WMF) se anuncia que la Biblioteca de Viipuri de Alvar Aalto, situada en Vyborg, Rusia, ha ganado el premio "2014 World Monuments Fund/Knoll Modernism", otorgado a la "Comisión Finlandesa para la Restauración de la Biblioteca de Viipuri" en el Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York el 1 de diciembre de 2014, gracias a su diseño final a través de la historia y su claro diseño funcionalista representativo de la arquitectura de Alvar Aalto.
La Staatsbibliothek o Biblioteca Nacional de Berlín fue proyectada entre los años 1967 y 1978 por Hans Scharoun y Edgar Wisniewski siguiendo la misma línea que la Filarmónica de Berlín, de Scharoun en el Kulturforum. Para su construcción se inicia por una primera propuesta por parte de Werner Düttmann para una nueva biblioteca en Kemper Platz, la cual fue rechazada por lo que en 1963 se convoca a concurso la construcción de la biblioteca en el Kulturforum, y es Hans Scharoun quien lo gana en 1964, pero no es hasta 1967 cuando se empieza a edificar dentro de un marco de peleas y conflictos, y la cual posteriormente quedará relegada a Edgar Wisniewski, desde la muerte de Scharoun en 1972 hasta la culminación de la obra en 1977, inaugurada finalmente en 1978 acompañada de varias reformas, ampliaciones y adaptaciones entre 1991 y 2015.
Sin embargo no todo fue tan continuo en el tiempo, ya que debido a la Segunda Guerra Mundial, la Biblioteca Nacional de Berlín quedó dividida en dos partes, una de ellas dentro de la zona occidental, bajo el control de los soviéticos, la cual fue ubicada otra vez en el edificio original de la Avenida Unter den Linden y la otra en manos de los aliados, es por eso que la biblioteca cuenta con dos zonas, la Sede 1, el edificio antiguo y la Sede 2, la propuesta realizada por Scharoun y Wisniewski, que actualmente se encuentran conectadas, bajo el nombre de “una biblioteca en dos casas”, con el fin de volver a conformar la Staatsbibliothek zu Berlín como parte del Patrimonio Nacional Prusiano.
El proyecto se localiza en una manzana triangular con dirección norte entre el Theater am Potsdamer Platz y al Spielbank Berlin, diseñados por Renzo Piano, que funciona como división entre el Kulturforum, la franja de la muerte, y el muro de Berlín, y destaca por su aparente masividad proveniente de la fachada dorada de 42 metros de altura, casi sin aberturas, en homenaje a las obras de Scharoun, el cual también proporciono al edificio una gran fachada de vidrio a través de la cual penetra la luz natural hacia la zona de lectura y se complementa con los lucernarios y las terrazas interconectadas por escaleras.
El desarrollo del proyecto de los archivos de la Bauhaus comienza por la construcción inicial de la Bauhaus, fundada por Walter Gropius en 1919 bajo el nombre de “Das Staatliches Bauhaus”, como una escuela de arte, y actualmente como un centro de vanguardia y movimiento moderno del arte, desde su inicio hasta 1933, pasando por el control de Gropius hasta 1927, Hannes Meyer hasta 1930 y por último Mies van der Rohe hasta 1933. Pero fue Hans Maria Wingler, en 1960, con la ayuda de Gropius, quien mostró interés por crear un proyecto destinado al estudio y al debate sobre la tradición histórica de lo moderno que albergara el instituto y la documentación histórica de la Bauhaus, por lo que junto a Wils Ebert, Alexander Cvijanovic, Louis McMillen y Gropius, entre los años 1964 y 1968, comenzó a construir el edificio como una estructura escalonada dividida en dos alas paralelas y a diferentes alturas, caracterizadas por el uso de lucernarios en lado norte.
Pero por motivos financieros su ubicación cambie y es trasladada a Berlín Occidental, ya sin la supervisión de Gropius, fallecido en 1969, pero bajo el mando de un ex-empleado suyo, Alex Cvijanovic junto al arquitecto Hans Bandel, realizan la reprogramación del proyecto y lo construyen entre los años 1976 y 1979, utilizando la organización básica del modelo de Darmstadt, cosa que provocó un necesario nuevo replanteo del proyecto y la aparición de una serie de modificaciones, dentro de las que Cvijanovic, por respeto a Gropius, decidió mantener los elementos formales originales como la diferenciación de los cuerpos constructivos, la morfología de la rampa que da acceso al primer piso o de la cubierta, junto a la separación estructural del espacio según su funcionalidad, de exposición permanente y exposición temporal vs el archivo y la administración
Tras varios años después de su finalización, con la caída del Muro de Berlín en 1989, el Archivo de la Bauhaus crece en cuanto a importancia, y es en 1977 cuando se declara Monumento Nacional como último legado a la arquitectura de Walter Gropius, que posteriormente, en 2019, terminará por concluir la nueva construcción de un museo al proyecto.
5. La Bibliothèque Nationale de France by Dominique Perrault, portrait d´un projet 1988-1998, Exposición en el BnF
Por orden del presidente François Mitterrand en 1988, se manda construir La Biblioteca Nacional de Francia a las afueras de la ciudad de París, y es en 1989 cuando el arquitecto Dominique Perrault resulta premiado por este gran proyecto, junto a otros importantes como pueden ser el Grand Louvre, la Opéra Bastille o el Institut du Monde Arabe, por la construcción de un edificio emblemático, del que nace un nuevo distrito de la ciudad, basado en el concepto de arquitectura de "Groundscape", una arquitectura subterránea capaz de redefinir la naturaleza para diseñar los contornos urbanos de la ciudad.
Es por ello que la BnF ha realizado una exposición: "Dominique Perrault - La Biblioteca Nacional de Francia, Retrato de un proyecto 1988 - 1998", en conmemoración al proceso de construcción de esta arquitectura contemporánea marcada por conflictos y una gran experimentación proyectual, no solo a nivel concreto de proyecto de la Biblioteca François-Mitterrand, sino a una escala más urbana dentro de su localización, que finalmente se expone en cuatro ámbitos: el objeto arquitectónico, el monumento y el territorio, el jardín, los materiales y el mobiliario, reflejados en planos y documentación original, además de en maquetas y el propio mobiliario diseñado por el arquitecto.
La Biblioteca Central de Seattle, diseñada por OMA en colaboración con LMN Architects, se crea a raíz de un estado de amenaza hacia las bibliotecas dentro de la era digital, por lo que se proyecta un espacio público donde transmitir y almacenar información, redefiniendo el concepto de biblioteca, donde 748.000 libros y 710.000 adicionales, se encuentran organizados mediante el sistema la Books Spiral (Espiral de Libros), en vertical divididos en 5 niveles, donde OMA organiza programas "estables" (estacionamiento, personal, reunión, espiral de libros, sede central) y 4 planos de programas "inestables" (niños, sala de estar, cámara de mezcla, sala de lectura) conectados y entrecruzados entre sí, los cuales condicionan la forma de la fachada, ya que cada espacio esta pensado arquitectónicamente distinto del resto, a nivel estructural, formal o de circulación.
Pero caracterizando al proyecto se puede destacar la Mixing Chamber (Sala de Mezcla) como uno de los espacios de mayor interacción dentro del conjunto del proyecto, entre personal y usuarios, donde los primeros guían al lector hacia la Books Spiral, una rampa de estanterías continua y orgánica, con una capacidad de almacenaje mucho mayor de la que hay actualmente, sin modificar la estructura ni añadir más elementos. Este área crea una zona de entramados estructurales semejante a un puente, el cual puede apreciarse con nitidez durante la noche a través de su fachada, asemejando el interior a una linterna que proyecta las formas hacia el paisaje urbano, convirtiendo todo el conjunto en un proyecto a contemplar dentro de la trama que le rodea.
La Maison de la littérature (Casa de la literatura) ha sido diseñada por Chevalier Morales Architectes, ubicada en el antiguo barrio de Old Quebec, Patrimonio Mundial de la UNESCO, y se diseñó como una expansión simple y delicada del que era el anterior Templo de Wesley, una antigua iglesia neogótica, para convertirse con el tiempo en un destino bastante transitado del barrio antiguo de Quebec. El proyecto nace a raíz de un concurso de arquitectura, el cual gana Chevalier Morales Architectes con el diseño de un nuevo volumen anexo al templo, con la misma funcionalidad, consiguiendo además una comunicación entre los dos estilos arquitectónicos, a la vez que consigue de manera eficiente, implantarse en el contexto del barrio quebequense, a través de una propuesta innovadora y elegante, que no solo contaba con una biblioteca, sino que también se incluía una sala de conciertos / conferencias, una cafetería, un espacio de exposición temporal, una exposición permanente, el apartamento de un escritor residente, estudios de creación, una sala de proyección y un aula como estudio multimedia.
Estas decisiones de proyecto ayudaron a transformar el Templo de Wesley en una biblioteca pública y una sala de conciertos y conferencias para el Institut Canadien, ofreciendo así un mejor acceso y la continuidad del espacio como una de las bibliotecas públicas más antiguas de la provincia de Quebec. Esta adhesión otorga al Institut Canadien una forma transparente y familiar, con una cubierta formada a base de paneles de vidrio, lo que le ofrece la posibilidad de mimetizarse con el entorno urbano, introducido al interior mediante la puerta principal del templo o el aparcamiento, convergiendo ambas en una gran abertura circular en el piso junto a un juego de luces central, conectando de esta forma verticalmente la cafetería, dos áreas de exhibición y las colecciones de la biblioteca, esta última bañada en luz y tonos blancos, accesible mediante una escultural escalera de caracol que da pie a elementos originales como molduras en el techo o ventanas ojivas junto a mobiliario más contemporáneo.
La solución que se presenta para este nuevo anexo está dirigido principalmente a mostrar, complementar y preservar el valor patrimonial del edificio existente, evitando alterar la composición arquitectónica estableciendo un diálogo a través de los materiales y la transparencia del proyecto, creando de esta forma una conexión entre el pasado y el presente del barrio histórico de la antigua ciudad de Quebec.
Bajo petición de la ciudad de Estocolmo, Caruso St John Arquitectos en colaboración con Scheiwiller Svensson Arkitektkontor se encargará de la restauración y ampliación de la Biblioteca de Gunnar Asplund, diseñado por el propio Gunnar Asplund e inaugurado en 1928, como una de las mejores obras de arquitectura moderna en el país de Suecia y a nivel mundial, siendo también la primera en ofrecer el acceso directo al usuario a las estanterías. Es por ello que se plantea la renovación de la biblioteca como algo necesario sobre todo en cuanto al edificio principal y los anexos que unen la estructura y complementos.
La ciudad ha elegido a Caruso St John Arquitectos por su convicción de creer ser los más acertados para llevar a cabo este proceso de restauración y reestructuración, suspendido desde 2009, ya que ha demostrado una clara experiencia en cuanto a la rehabilitación de edificios históricos y culturales se refiere, por lo que el estudio como respuesta a la confianza aportada centrara su intervención en la reorganización de los espacios interiores del edificio, que será re-planificados para ayudar a la biblioteca a adaptarse a las demandas contemporáneas, después de un exhaustivo análisis de las deficiencias del programa y la estructura.
En la 3ª edición de Open House Madrid, uno de los edificios a presentar es el de la sede de la UNED Escuelas Pías diseñado por José Ignacio Linazasoro, ubicado en Lavapiés, último barrio "antiguo" de Madrid, construido entre 1996 y 2004 como un diálogo entre el presente y el pasado el cual también caracteriza al barrio donde conviven en armonía la arquitectura antigua y la moderna, dando fe de ello la convivencia de las ruinas de las antiguas Escuelas Pías de San Fernando y el vacío de la Plaza de Agustín Lara, ambos supervivientes de la Guerra Civil, iglesia la cual dejó ver la resistencia de la estructura de sus muros, escondidos tras el velo de estucos y un mobiliario excesivo.
El proyecto se lleva acabo en estas ruinas y en el solar próximo a estas, planteándose como una actuación de reordenamiento urbano en torno a la plaza. En el nuevo solar, Linazaroso plantea un Aulario Universitario y en las ruinas una biblioteca, construidos en unidad y bajo la influencia de las propias ruinas, pero con distintos espacios y sistemas constructivos que otorgan singularidad a cada proyecto, contrastando algunos elementos de arquitectura moderna con alusiones y citas del pasado, otorgando a la intervención de un carácter propio, también definido por el usos de juegos de espejos con el fin de reflejar en cada rincón la imposición de cada zona del proyecto, por lo que se tendrá en cuenta la incidencia de cada material y textura de la composición.
El Archivo Regional de la Comunidad de Madrid y la Biblioteca Regional Joaquín Leguina, ambos como parte del complejo de la antigua Fábrica de Cerveza El Águila, han sido proyectados por los arquitectos Tuñón y Mansilla. La Fábrica de Cervezas El Águila fue fundada en 1900 y construida por Eugenio Jiménez Correa y su rehabilitación abarcó los años entre 1996 y 2002, siendo en la actualidad una de las muestras de arquitectura industrial más interesantes que quedan en Madrid, la cual originalmente estaba formada por diez edificios y sus calles, sobre un gran solar. Esta arquitectura se caracterizaba por no diferenciarse del resto de construcciones ya que en España se construían en ladrillo, proporcionándole cierta racionalidad, es por eso que todas las fachadas de la fábrica se encuentran edificadas con ladrillo visto sin revestir, influenciada por la arquitectura neo-mudéjar
Pero con la aparición de la Guerra Civil la fábrica cambió de manos durante unos años, lo que provocó que cuando fuese devuelto a sus dueños originales, ya se habían producido numerosas ampliaciones y modificaciones, y la cosa fue empeorando cuando en 1978 el COAATM llegó a la conclusión a través de los vecinos de la zona de que la fábrica había perdido todo interés arquitectónico por lo que en los 80 quedó abandonada. Pero la cosa cambia cuando en 1990 se declara “Bien de Interés Cultural” y en 1994 se convoca un concurso para rehabilitar la función de su interior, concurso que ganan Emilio Tuñón Álvarez y Luis Moreno Mansilla, los cuales acabaron proyectando la nueva Biblioteca Regional y el Archivo Regional de la Comunidad de Madrid, que en un principio iba a ser un centro de expresión artística.
El Archivo Regional está conformado por 3 módulos separados según su función: ingresos, depósitos y atención al público, y la Biblioteca Regional se construye en base a un programa diversificado enfocada a una biblioteca multimedia que reutiliza los distintos espacios industriales que allí se hallaban. Ambos proyectos tienen la finalidad de conservar, custodiar y difundir el patrimonio histórico, y aunque se encuentran separados, se construyen unitariamente siguiendo la idea original de arquitectura industrial, pero mezclándola con la moderna, integrando definitivamente el conjunto en la trama urbana.